miércoles, 30 de julio de 2008

A su manera, los bebés también piensan


Los bebés están dotados de forma innata para pensar, función que como tantas habrá de desarrollarse en la medida de su maduración corporal, cerebral y sensorial. Cuanto más se observa a un bebé, cuánto más atención se les presta a todos los detalles pequeños de su conducta, se descubren más las capacidades de relación con su ambiente. Ya es conocido el hecho de cómo se calma un bebé al nacer si es puesto en contacto con su madre. Ahora bien, ¿con qué se vinculan esos primeros "pensamientos"? ¿Existen vestigios en la vida adulta de aquello que pensábamos cuando éramos bebés?
La captación del mundo que hace un bebé no es racional: es emocional, es corporal, es sensorial, y puede ser expresada en términos verbales por el adulto que actúa en consecuencia.
Los primeros "pensamientos" -denominados protopensamientos porque no tienen una conexión verbal todavía- se vinculan a las experiencias de hambre, de separación, de calma, de calor, de presión, de luz, de sombra, en fin: todas experiencias corporales, que constituyen la primera realidad del bebé, su propio cuerpo sentido como algo independiente de su mente, algo que le presenta un primer problema a resolver.

Pensar sin palabras

El bebé pide ayuda, grita, llora y gime. De hecho en su voz hay matices que una madre sensible puede aprender a descubrir. Estos primeros pensamientos no verbales luego entran en el flujo, en la corriente de pensamientos verbales más tarde, cuando el niño aprende a expresarse. La relación entre lo verbal y lo no verbal será más o menos conflictiva según el grado y la forma de integración de esas primeras experiencias, que forman la base de la personalidad. Si bien nadie recuerda sus primeros meses de vida, hay algo que persiste en cada uno de nosotros del bebe que fuimos. "Cuando en los primeros contactos la madre se ausenta, retira su pecho, el bebe la imagina, la alucina. Muchas veces se ve al bebe succionar y sonreír, esto es porque está soñando a su mamá y también pensándola. Y la sueña feliz hasta que vuelve el hambre entonces el chupeteo no alcanza, no sale leche del propio bebé, ya no es la placenta, el cordón umbilical siempre presente: hay algo que no está y se siente como dolor. El bebé, se enoja, llora, siente que hay algo malo allí. Su captación del mundo es deficiente e interpreta la ausencia como una presencia mala", explica la psicoanalista y miembro titular de la Asociación Psicoanalítica Argentina (APA), Claudia Lucía Borensztejn.
Según la especialista, a veces se observa hasta qué punto el bebe imprime esta imagen negativa sobre el pecho presente, y lo rechaza cuando la madre vuelve. De ahí nace su primera concepción del mundo como bueno y malo, si lo satisface o lo frustra. "Muchas personas conservan esta concepción en la vida adulta, clasifican el mundo según si les es o no afín a sus necesidades. Es la persistencia de la mentalidad del bebé en el adulto y de su forma de pensar", sostiene.
La perfección del vínculo madre-hijo, esa captación sin palabras a través de la placenta, el cordón umbilical y el suministro constante, no se da nunca más después del nacimiento, salvo por momentos en que el abrazo del ser amado se hace presente o cuando el bebé mira a los ojos de la madre que lo amamanta, o escuchando la música que emociona, o viendo la belleza de un paisaje. "Ese sentimiento de fusión con lo que apreciamos como belleza del mundo o como obra humana, ese llamado sentimiento oceánico sólo a veces se presenta -explica Borenzstejn-. El resto es imperfección, necesaria por cierto para la mente, que se desarrolla en contacto con la realidad, que aprende a tolerar las frustraciones, los desajustes y esperas necesarias para vivir y pensar. Entonces el lenguaje se desarrolla en la ausencia: el bebe llama a su madre que no está y nombra lo que no puede alcanzar."

La evolución del pensamiento

El pensamiento del bebé se desarrolla desde una mentalidad primitiva a una más evolucionada, de una mentalidad egoísta centrada en las propias necesidades a una mentalidad considerada hacia los otros. Aunque según los expertos, las cosas no son sencillas en este terreno y las explicaciones simples o causales no son aptas para entender procesos tan complejos.

CAROLINA STEGMAN

Ya hay 120 mil infectados con VIH/sida en el país

Por: Pilar Ferreyra
En el país ya viven 120.000 personas con VIH según el Informe sobre la epidemia mundial de sida de Naciones Unidas 2008 (ONU). Aunque la tasa de nuevas infecciones está decreciendo y las autoridades de Salud de la Argentina aseguran que la epidemia se encuentra estable. "La epidemia está estabilizada.
En los últimos cuatro años están ingresando 2.500 personas a tratamiento por año", detalló a Clarín el director de sida y ETS, Claudio Bloch. Según datos oficiales del Ministerio de Salud de la Nación mientras en 2001 la tasa de nuevas infecciones era de 15 infectados cada cien mil habitantes, en 2006 esa tasa cayó a 11 infectados por cada cien mil habitantes. La tasa de 2007 aún no trascendió a causa de un retraso en las notificaciones.
Según el informe de ONU en el mundo se infectan de VIH 7.500 personas por día. "En la Argentina la media de ingreso de nuevas infecciones es de 5.000 por año según los registros tomados entre 2001 y 2005", puntualizó Bloch.
El informe de la ONU puntualiza que en América Latina viven 1,7 millones de personas con VIH, la mayoría de los cuales están en Brasil y en México. Pese a la relativa estabilización de la epidemia en 2007 se presentaron en Latinoamérica 140 mil nuevas infecciones y murieron 63.000 personas como consecuencia de enfermedades relacionadas con el sida.
De acuerdo a la ONU, Brasil se mantiene como el país con mayor número de personas infectadas de VIH (730.000), México como el segundo (200.000). Colombia ocupa el tercer lugar (170.000) y Argentina como el cuarto. Los resultados del informe de ONU fueron presentados seis días antes de que en México se inaugure la XVII Conferencia Internacional de Sida.
César Núñez, director para Latinoamérica del programa de sida de la ONU insistió en la prevención. De lo contrario, dijo, "no va a haber fondos suficientes para pagar los tratamientos que puedan ser requeridos para las nuevas infecciones. Hoy en día se dan cinco nuevas infecciones por cada dos personas que entran en tratamiento". América Latina tiene la tasa más alta de cobertura de tratamientos con retrovirales (62 por ciento). "Lo cual es satisfactorio pero no suficiente", dijo Philippe Lamy de la Organización Panamericana de la Salud en México.

martes, 29 de julio de 2008

Nuevo método para sacar sangre


Los científicos examinaron 200.000 análisis de sangre y descubrieron que este método causaba un aumento en los niveles de potasio y por lo tanto podía confundir potencialmente los resultados de las pruebas.
La presencia de altos niveles de potasio puede indicar problemas renales o cardíacos, señala el estudio publicado en los Anales de Bioquímica Clínica.
Vanessa Thurlow, bioquímica y coautora del informe, notó este problema por primera vez cuando un médico analizaba los resultados de las pruebas de sangre de un número reducido de pacientes.
Cuando ella repitió las pruebas observó que los niveles eran normales.
Thurlow le pidió a los directores del servicio de extracción de sangre que instruyan a su personal para que abandonen esta práctica. Después de que se introdujo este cambio, los niveles de potasio en los resultados comenzaron a disminuir considerablemente.
Pasado de moda
El método de cerrar el puño y luego abrirlo antes de sacar sangre se impuso en la década de los 60. Desde ese entonces, ha pasado de generación en generación.
"Lo mejor es pedirles a los pacientes que no cierren el puño con fuerza sino con suavidad cuando les insertan la aguja y que luego lo relajen completamente antes de que comience la extracción" Jackie Hough"Es una cuestión de suerte, muchos han sido entrenados para usarlo y otros no", comentó Thurlow.
Pero éste no es el único factor que puede alterar los resultados de una prueba sanguínea, añadió la investigadora, la exposición al frío por ejemplo, puede también provocar un aumento en los niveles de potasio.
La razón por la que los enfermeros hacen cerrar fuertemente el puño a sus pacientes es porque mejora la circulación sanguínea y hace más visibles las venas, facilitando el procedimiento.
Jackie Hough, presidenta de la asociación británica dedicada a las extracciones de sangre, coincide con la teoría de Thurlow.
"Lo mejor es pedirle a los pacientes que no cierren el puño con fuerza sino con suavidad cuando les insertan la aguja y que luego lo relajen completamente antes de que comience la extracción.
"Asimismo", recomendó Hough, "el torniquete no debe permanecer en el brazo por más de 60 segundos durante el procedimiento".

La 'Generación X' se hace mayor



Douglas Coupland tiene 47 años. Han pasado 17 desde que apareciera la novela que lo cambió todo en los noventa: Generación X. El libro que contaba de qué iba realmente el consumismo y qué lugar ocupaban los jóvenes en aquella órbita de mcjobs, mcfriends y mcloves. La historia -posmoderna- que señalaba en el papel lo que Kurt Cobain rasgaba en su guitarra. El texto que gritaba a los lectores que la vida era un puro hartazgo y que la revolución sólo se podía hacer desde el sillón. Sin más.
Casi dos décadas después de aquello todo ha cambiado. A Coupland están a punto de caerle los 50 años y el disco Nevermind es de catálogo. Sin embargo, casi ninguno de los escritores que se vieron envueltos en aquella etiqueta - Bret Easton Ellis, Irvine Wesh, autor de Trainspotting, Chuck Palahniuk- ha desaparecido del mapa (obviemos a Elizabeth Würtzel y su Nación Prozac). Al contrario: se han hecho mayores y han evolucionado.
El mejor ejemplo es el nuevo libro de Coupland, El ladrón de chicles (El Aleph), editado hace unos meses en castellano. Cuenta la historia de Roger Thorpe, cuarentón que lo ha perdido todo (mujer, hijos) y trabaja en un almacén sin ningún tipo de ilusión. Hasta ahí todo muy X. Sin embargo, entre sus páginas también está Bethany, una veinteañera que no está dispuesta a quedarse de brazos cruzados ante una vida de trabajo y amantes basura. ¿Qué ha pasado con Coupland? ¿Al final todo no es tan malo como lo pintaban?
Bienvenido el cambio
El escritor Ismael Grasa (Huesca, 1968), al que los medios y editoriales noventeros le sumaron a la generación X española junto a Ray Loriga, José Ángel Mañas y Lucía Etxebarría, entre otros, está de acuerdo con esta evolución y la considera muy positiva. "Yo prefiero la madurez a lo que se denomina frescura. Además, si no hubiéramos evolucionado, seríamos los eternamente jóvenes y eso no es bueno para la literatura", afirma. Así, recoge de buen agrado que, tanto Coupland como los escritores españoles de aquella época, escriban hoy historias "que no son sólo de ficción o que la reflexión es más consciente".Los jóvenes de los 90 se han hecho mayores y tienen hijos. También literarios. La generación posterior (sin letras) ya está en el mercado, pero, por suerte, esta vez no han matado del todo al padre, aunque crean haberlo hecho. Los X de ayer, son todavía los treintañeros de hoy."Yo creo que en los escritores más emergentes hay mucho de la Generación X, sobre todo en la asimilación del lenguaje", reconoce Grasa. Y da nombres como el de Cristina Grande, autora de Naturaleza infiel.Otros autores que han bebido de esas historias hiperrealistas y desestructuradas que hablaban de amor, sexo y marcas de champú son los que hoy se han enmarcado en la llamada Generación Nocilla, capitaneados por Agustín Fernández-Mallo y Ricardo Menéndez Salmón. Entre ellos se encuentra también Juan Manuel Gil (1979), quien reconoce la influencia de Ray Loriga.
Eso sí, como todas las generaciones, quieren sus símbolos de distinción: "Yo creo que ahora ha desaparecido bastante el hastío de los 90. No hay esa resignación de entonces. Y, además, pienso que ahora hay una mayor fusión de géneros. Lo visual está por todas partes, pero ya no es sólo el cine, sino Internet", admite Gil. Curiosamente, Coupland se ha subido a esta corriente y Nirvana regresa con más fuerza que nunca. ¿Quién dijo adiós a la famosa X?

lunes, 28 de julio de 2008

Cuarta edad: los mayores de 80 ya son casi un millón en el país



Los avances científicos y tecnológicos de las últimas décadas del siglo XX permitieron controlar y prevenir las enfermedades degenerativas, en particular el cáncer y los males cardiovasculares. Esos logros se tradujeron en el crecimiento de la esperanza de vida de la población en general. Y hubo un sector que se vio especialmente beneficiado: el que los expertos denominan "edad extrema", la cuarta edad.
La Argentina reproduce lo que ocurre en buena parte del mundo: hoy hay unos 800 mil adultos mayores, y en un año y medio representarán casi un millón de personas, de acuerdo con las últimas proyecciones del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
Hoy, además, las personas llegan a los 80 años con mejor nivel de salud general que lo que lo hicieron las generaciones anteriores. Muchos dejaron de fumar cuando eran jóvenes o nunca lo hicieron, se alimentaron bien, siempre hicieron deportes y, además, aquellos de clase media y alta generalmente accedieron a tecnología de alta complejidad para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades. Lo que explica la variación de la expectativa de vida según los distintos estratos sociales y regiones del país. Mientras los mayores de 65 años de la Ciudad de Buenos Aires esperan vivir 17,47 años más, el grupo de la misma edad de Chaco esperan vivir 14,33 años más."El aumento de la proporción de personas de 80 y más años es el principal promotor de la necesidad de programación de servicios para personas dependientes de terceros a causa de déficit físicos o cognitivos", analizó la doctora en Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires (UBA) Nélida Redondo, especialista en Sociología del envejecimiento. Debido al aumento en la expectativa de vida, en promedio, las mujeres de 80 pueden llegar a vivir casi hasta los 88 años y los varones hasta los 86, según datos elaborados por Redondo. A medida que se amplía el grupo de ancianos mayores aumenta la potencial dependencia que ellos podrían tener de sus hijos de entre 50 y 64 años. Hoy, según datos propios de Redondo por cada 10 adultos de 50 a 64 años hay casi dos ancianos mayores que podrían necesitar de sus cuidados. "La discapacidad no es una condición sine qua non de la vejez. Toda persona dependiente es una persona con discapacidad, pero no toda persona discapacitada es dependiente. Hay personas con discapacidades que son autónomas", puntualiza la doctora en Sociología especializada en discapacidad e investigadora de Conicet, Liliana Pantano. La experta también advierte que "las políticas de discapacidad no están suficientemente desarrolladas para todos los grupos de edad y menos aún para los mayores de 80 años".
Tanto Pantano como Redondo y Torrado coinciden en la falta de programas de servicios públicos y privados para los ancianos mayores. Lo que permitiría a aquellos que desean y pueden vivir en forma autónoma, conservar su independencia y libertad.La jubilación es un componente básico de los ingresos de las personas mayores. A fines de 2001 la jubilación representó el 60 por ciento del total de los ingresos de las personas de 65 y más años de todos los aglomerados urbanos del país. Y en 2003 se eliminaron los cupos presupuestarios y se extendió la cobertura de las pensiones asistenciales de la vejez a las personas mayores de 70 años de escasos recursos. "La medida tuvo resultado inmediato. Se logró reducir drásticamente la indigencia tanto en los hogares con adultos mayores como en los de jefes mayores de 65 años", analiza Redondo. Sin embargo, también advierte que uno de los desafíos del siglo XXI es alcanzar un nivel de productividad que erradique la pobreza y permita a quienes se retiran del mercado laboral -a causa de su edad o su condición física- "la capacidad de consumo de los bienes y servicios necesarios para vivir plenamente, con la adecuada integración social".



El 10% tiene 65 años y más
El grupo de 65 y más años es el 9,9% del total de la población argentina. Esto la define como "envejecida" porque -según acuerdos de la ONU de 1956- este grupo supera el 7% del total. En los últimos 150 años las poblaciones de países con alto nivel de desarrollo económico envejecieron de manera pareja. Europa, América del Norte, Australasia (Australia, Nueva Zelanda, Nueva Guinea e islas en el oriente de Indonesia) y Japón son las sociedades más envejecidas del mundo.



Longevos
Eduardo San Pedro
Vivieron de sorpresa en sorpresa. Cuando nacieron, no había -entre muchas otras cosas- radio a transistores ni TV. Tampoco aviones jet, píldora anticonceptiva, computadoras, corazones artificiales. Y el hombre no había llegado a la Luna. Ahora, gracias a otros avances, especialmente en la medicina, forman parte de la "cuarta edad", los mayores entre los mayores, los longevos. Pero las sorpresas, ahora, pueden nublar el futuro. La sociedad no parece estar preparada para cuidar y dar sustento a esta nueva realidad.

domingo, 27 de julio de 2008

Los golpes emocionales también pueden provocar dolores físicos



El dolor nos agarra, hermanos hombres/por detrás de perfil,/y nos aloca en los cinemas,/nos clava en los gramófonos,/nos desclava en los lechos, cae perpendicularmente/a nuestros boletos, a nuestras cartas;/y es muy grave sufrir, puede uno orar. El poeta peruano César Vallejo no fue el único --y mucho menos el primero--, en referirse al dolor provocado por la pena.
Esas referencias son tan antiguas como el dolor mismo. Las emociones perforan al hombre desde tiempos remotos aunque siempre se han tratado metafóricamente como algo supuestamente incorpóreo. No obstante, ahora, nuevas investigaciones les ha permitido a los científicos confirmar que sí, que el sufrimiento emocional puede también doler físicamente.
Estos estudios, en universidades de Escocia y de Estados Unidos, dan cuenta de que la misma parte del cerebro donde se registra el dolor físico también se ocupa de procesar el dolor emocional, y entonces, de la misma forma en que una lesión fisiológica podría convertirse en un padecimiento crónico, son muchas las personas que no logran dejar atrás una de esas "heridas del alma".
Los golpes emocionales se evidencian de muchas maneras: desde el extremo de perder a un ser querido, soportar el final de una relación, y hasta sentirse excluido socialmente. Precisamente este último tema, el de la exclusión social, fue el que llevó a la investigadora Naomi Eisenberger, de la Universidad de California (UCLA) a prestar atención a sus consecuencias físicas. "Nos mostramos particularmente interesados en cómo registraba el cerebro las situaciones de exclusión. Y nos llevamos la sorpresa de ver que produce dolor de cabeza, pero uno verdadero e intenso", comentó la científica a Clarín vía e-mail.
El profesor David Alexander, director del Centro de Investigación de Trauma, en Aberdeen, Escocia explicó --al momento de presentar sus resultados-- que las consecuencias físicas de algunas penas se traducen como "un dolor en el pecho" o "un vacío debajo del esternón". "Hablan, por ejemplo, de que les explota la cabeza o de un dolor en el estómago. Es un paralelo muy fuerte", dijo.
Los avances en neurociencias permitieron comprender el complejo funcionamiento del cerebro. Los primeros estudios se focalizaron en la comprensión de los mecanismos neurales de la percepción del dolor físico y su interacción con las emociones. "Así sabemos que existe una íntima relación entre el fenómeno físico y su repercusión emocional. Desde hace unos años se estudia el camino inverso: la búsqueda de los mecanismos involucrados en la transformación del dolor emocional, producido por abandono o exclusión, en dolor físico", comparte Alicia Lischinsky, jefa de neuropsiquiatría del Instituto de Neurociencias de la Fundación Favaloro y del Instituto de Neurología Cognitiva (INECO).
Además de las situaciones de grandes pérdidas, como romper una relación o perder un ser querido, el tema de la exclusión se manifestó como un factor poderoso de heridas emocionales. "Es que somos seres condenados a la socialidad por causa de nuestra inmadurez inicial y nuestra extrema dependencia al nacer", puntualiza Irene Meler, coordinadora del Foro de Psicoanálisis y Género de la Asociación de Psicólogos de Buenos Aires. Y agrega: "El remedio para sobrellevar mejor los dolores emocionales es generar más vínculos, más redes sociales"Ya lo sentía Vallejo: Pues de resultas/del dolor, hay algunos/que nacen, otros crecen, otros mueren,/y otros que nacen y no mueren, otros/que sin haber nacido, mueren, y otros/que no nacen ni mueren (son los más).



Evolución
Eliana Galarza
En una charla sobre dolores físicos y emocionales con el cardiólogo López Rosetti, surgió el tema evolutivo. ¿El cuerpo humano, resultado de millones de años de evolución, está preparado para enfrentar situaciones negativas? No. Parece que tenemos un corazón frágil, "diseñado" para vivir bien unos 30 años. Sin embargo, las emociones complejas --las que nos diferencian de otros seres vivos-- y el aumento de la expectativa de vida nos llevan a vivir 90 años entre más exigencias emocionales de las que podemos soportar. Habrá que apelar al instinto de supervivencia, que tanto nos ayuda a seguir.


Consejos
1 Para evitar que las emociones negativas afecten en extremo a la salud física se pueden tomar algunas medidas. "Comprender nuestra integridad cuerpo/alma debería ayudarnos a que frente al dolor busquemos alivio en la compañía de seres queridos, evitemos el aislamiento, y cuando el alivio no llega nos planteemos la posibilidad de buscar ayuda profesional", sugiere el cardiólogo Carlos Tajer.2 "Los dolores psíquicos más desgarradores derivan de la pérdida de vínculos, ya sea con una personas privilegiada por nosotros o con el conjunto de nuestro entorno. Hay que crear más vínculos, más redes sociales", recomienda la psicóloga Irene Meler. 3 La pareja, bien constituida, puede ayudar a aliviar el estrés y a enfrentar lo negativo.

sábado, 26 de julio de 2008

Todas quieren el caño en casa

Tamara Smerling
26.07.2008
No hay que agujerear techos ni pisos para colocarlo. Cuando llegan visitas al living de casa se puede desmontar en un instante. La instalación cuesta, en promedio, unos 800 pesos y sólo se necesitan tres metros cuadrados de espacio para hacer piruetas y acrobacias.
“Ya instalé caños en dormitorios, garajes, livings, en cualquier lugar donde a la gente que lo va a utilizar le resulte cómodo, porque es desmontable. Si lo sacás nunca te enteraste que estuvo ahí. De cinco llamados por semana que recibíamos en la empresa pasamos a veinte consultas por día”, dice Omar Collazo, que armó una empresa a la que llamó Easy Pole, y que instala a domicilio las ahora famosas barras de entrenamiento para practicar el “baile del caño”. “Estamos trabajando muy bien desde hace seis o siete meses, recibíamos cinco consultas por semana, pero en los últimos veinte días se masificó la llegada de correos electrónicos y llamados a la empresa”, cuenta Collazo, mientras describe que entre sus clientes figuran desde chicas de veinte años hasta amas de casa que pisan los cincuenta y que, cansadas del gimnasio, de los aparatos o del Pilates, se volcaron al “baile del caño”.
Karina Díaz tiene 31 años y dos hijos: Camila de siete y Valentín de cuatro. Como no tiene mucho tiempo para practicar fuera de su casa decidió instalar la barra a la vista de sus hijos y de su marido, que ahora la aplauden cuando se entrena en vivo: “Yo tomo clases hace un año y hace tres meses me enteré de que había una persona que lo colocaba en casa, que el precio era accesible y entonces llamé”. Karina asegura que desde que instaló el caño su casa se transformó en “una plaza”, porque además de entrenar en cualquier momento del día, “mis hijos llegan del colegio y se ponen a jugar”, y se ufana: “Mi nena más grande hasta aprendió algunas técnicas y coreografías”. Karina cuenta que su marido ya no se sorprende de verla treparse porque “ya está acostumbrado”, que “la parte sensual ya se perdió y toda la familia está incorporada al pole dance”.
En Mercadolibre.com y Masoportunidades.com tienen promociones para practicar “el baile del caño”: en las páginas de venta directa por internet se puede encontrar en un par de segundos barras de entrenamiento que se entregan a domicilio: los precios van de 780 a 1.280 pesos y vienen con fotos de living alfombrados color rosa viejo o lustrosos mosaicos color caqui.
Collazo dice que la barra más famosa que colocó es de la que se cuelgan actrices y vedettes en el estudio mayor de Ideas del Sur. “Además de las consultas particulares estoy recibiendo propuestas para instalar caños en gimnasios del interior del país que están interesados en este deporte y que pretenden que coloque las barras en centros de entrenamiento de Catamarca, Pilar o La Pampa”, dice y explica que instaló cincuenta barras en viviendas porteñas y que ya tiene comprometidos otras quince colocaciones para los próximos días.
Carolina Fonzo tiene 29 años y es arquitecta. Hace dos años que baila pole dance y unos meses que instaló el caño en una habitación de servicio que estaba desocupada en su casa. “Tengo una rutina diaria que me dio mi profesora, que hago todos los días durante una hora, es como si tuvieras una bicicleta fija o una colchoneta para hacer abdominales. Es piola porque al tenerlo en tu casa te permite no depender que esté abierto o no el estudio donde vas a practicar pole dance”, dice la chica, que asegura que sus compañeras de estudio son amas de casa o profesionales que lo toman como un deporte.
El material con el que se fabrican los caños es acero inoxidable. Se le hace un pulido especial para que les dé “agarre” a las chicas y no se resbalen. La barra tiene una rosca que se coloca a presión sobre techos y pisos de la casa. Se mueve a partir de una “llave” que viene incluida en la promoción junto con el caño y que es muy similar a las barras de cortinas para baños que hacen presión entre dos paredes. “Lo que empezó como algo tranquilo, está dando un golpe de tuerca”, dice Collazo, quien describe cómo ensambla, arma las bases y compra acero inoxidable de fabricación nacional para hacer las barras.
Cecilia estudia producción de modas y trabaja como promotora. Tiene 26 años y amigas que son streapers. Pero asegura que su pasión por el “baile del caño” no es por trabajo y mientras viaja desde Palermo en el tren que la lleva a su clase, hace una cruda defensa de la danza: “Este baile no es solamente lo que se ve en Showmatch, es una actividad que tiene un montón de técnicas aéreas y acrobacias que hacían los chinos (sic). Sí tiene sensualidad, pero no es exclusivamente erótico”. La chica cuenta, además, que instaló una barra móvil en el living de su departamento de dos ambientes para “poder practicar todos los días y aprenderlo mejor de acá a un año”, a pesar de que su papá casi se muere de un infarto cuando entró en la casa de “la nena” y vio una barra de hierro plantada en el medio del living de la casa.

Macho, no seas maricón y llorá

26.07.2008-Crítica de la Argentina
Se tiñen, se encreman, se depilan y la novedad ahora es que lloran a chorros. Si hasta el momento la “nueva masculinidad” tenía alcances sólo estéticos, dos estudios recientes aseguran que a los varones también se les ablandó el alma: según datos de una encuesta realizada por el portal Askmen.com, el 75% admite haber derramado lágrimas alguna vez por una mujer.
Además, un relevo publicado en el libro Llorar, el misterio de las lágrimas destaca que en las últimas tres décadas el “pucherito” masculino aumentó un 300 por ciento.
¿Estamos ante un nuevo síntoma de sensibilidad?
“Los resultados de esta encuesta pueden ser sorprendentes para las mujeres, muchas de las cuales tienen una perspectiva completamente distinta de lo que la mayoría de los hombres piensa y siente”, asegura James Bassil, editor jefe de Askmen.com. “Es cierto que se rompió un estereotipo masculino, pero tampoco exageremos: aparecer llorando en una relación es bochornoso. Dudo que a alguna mujer le guste y por ende no creo que muchos hombres lo practiquen”, desmiente Rodolfo Sbrissa, periodista y autor del libro El hombre embarazado (Manual de autoayuda para padres en la dulce espera).
Sensibles o llorones, cada vez más hombres se animan a piantar –con mayor o menor grado de honestidad– un lagrimón en público. El gobernador cordobés Juan Schiaretti lloró cuando condenaron al represor Luciano Benjamín Menéndez; el ya jefe de Gabinete Sergio Massa lagrimeó cuando abandonó su cargo en la Municipalidad de Tigre; Domingo Cavallo pasó a la historia con su llanto frente a Norma Pla y –allende las fronteras– hasta George W. Bush tuvo su pico de popularidad cuando se mostró moqueando en la Zona Cero (donde estaban las Torres Gemelas).
El mundo del espectáculo –y esta vez no hablamos de política– también tiene a sus reyes de la lágrima: Facundo Arana es el arquetipo del varón sensible (“Antes los galanes no lloraban, eran recios... no sé si yo podría componer un personaje así”, le dijo a la revista Veintitrés), Gastón Pauls siempre enarboló su perfil más frágil y hasta el bailantero Daniel Agostini les escribió a los sensibles un tema llamado Hombres que lloran.
MIRADA HÚMEDA.
¿La mirada húmeda es señal de un corazón más blando? “No”, contesta el especialista Sergio Sinay . Y Alejandro Dolina coincide con esta respuesta: “Los hombres sensibles son una convención literaria, en la vida real no los hay –le dijo a la revista En plenitud–.
El hombre sensible químicamente puro existe únicamente en los loqueros”.
NO TAN LOSER.
El primer registro de llanto masculino –por afuera del de Jesús en la cruz– sucede en una leyenda. Cuenta la historia que el rey moro Boabdil (Muhammad XII) firmó la capitulación con los reyes católicos y que como consecuencia de esa rendición tuvo que irse junto a su familia al destierro. Durante todo el camino, Boabdil no miró atrás. Pero al llegar a la colina conocida como El Suspiro del Moro, miró hacia Granada –la ciudad que abandonaba–, suspiró y se largó a llorar. Fue entonces que su madre le soltó un reproche: “No llores como mujer lo que no supiste defender como hombre”.
Con semejante carga cultural, a lo largo de la historia fueron pocos los varones que se animaron a lagrimear en público. La primera investigación sobre este tema fue realizada a fines de los años 70 y arrojó que las mujeres lloraban un promedio de 30 veces al año, mientras que los hombres sólo lo hacían seis. Treinta años después, el investigador y fisiólogo William Frey realizó un estudio idéntico y lo publicó en el libro Llorar, el misterio de las lágrimas. El resultado sorprendió: ahora las mujeres lloran 64 veces al año y los varones lo hacen en 17 oportunidades.
Es decir que ellos se emocionan tres veces más que hace 30 años. ¿Hacen bien? “No lo sé... –duda Rodolfo Sbrissa–. Los hombres se emocionan más porque tienen más licencia para hacerlo, pero yo recomiendo conservar la dignidad. A veces es preferible aguantártela y no ser tan loser. Porque una cosa es jugarla de antihéroe, pero otra es transformarte en llorón”.

Para bajar de peso ya se trabaja más con la mente que con el cuerpo

Nada más desgastante que vivir haciendo dietas. Es como esas historias de nunca acabar. Pero ahora, especialistas de la Sociedad Argentina de Obesidad y Trastornos Alimentarios (SAOTA) proponen una manera distinta para combatir la obesidad: el tratamiento cognitivo conductual, que busca modificar no sólo el peso sino también la conducta de las personas.
"El tratamiento cognitivo conductual es una técnica que se aplica a todas las afecciones crónicas que requieren un cambio conductual-comportamental para su mejoría. Se usa cada vez más porque es una herramienta que se incorpora al individuo, que no tiene contraindicaciones ni efectos colaterales y que potencia toda otra estrategia", explica a Clarín Julio Montero, presidente de SAOTA.
Allí ya se trataron 500 pacientes y ahora hay 150 en tratamiento. Usan 5 estrategias: el automonitoreo (el paciente registra sus hábitos y detecta situaciones críticas), el control de los estímulos (se identifican las condiciones ambientales asociadas con la sobrealimentación y la baja actividad física), la reestructuración cognitiva (se modifican pensamientos y creencias), el manejo del estrés (para bajar la ansiedad) y el apoyo social (interacción con otros pacientes).
"Una ventaja es que enseña e inculca comportamientos saludables apelando a estrategias personalizadas. Este conocimiento se llama reestructuración cognitiva y queda incorporado a la persona.
Para el diagnóstico de la situación se investigan los factores asociados a estos actos. El sujeto es entrenado para evitar el estrés, y se recurre a los familiares", explica Montero. Y agrega: "Los hábitos se instalan haciendo que se reiteren automáticamente. El objetivo es interferir esa secuencia y sustituirla por otra más conveniente". Los tratamientos son grupales o individuales.
Liliana Aróstegui, miembro del Centro de Terapia Cognitiva de Buenos Aires, lo explica así: "Los tratamientos cognitivo conductuales demostraron ser efectivos, de menor duración y con resultados duraderos. Lo central es la prevención de recaídas. Durante el tratamiento se pone el acento en este objetivo, que es lo que le permite al paciente generar recursos de autoasistencia ante una recaída. Para tratar la obesidad es fundamental trabajar con las creencias de la persona acerca de criterios relacionados con la belleza, la autoestima. Todos gestados desde la infancia y evidenciados en patrones reiterados que hacen del obeso una persona infeliz. Es imprescindible llevar a la conducta lo trabajado cognitivamente. Este abordaje hace que mediante registros de pensamientos, emociones y conductas se pueda focalizar en la problemática del paciente. Conductualmente quiere decir hacer listados de alimentos, programas de actividad física, y hasta salir a comer con los pacientes".

jueves, 24 de julio de 2008

Cuando nacer depende de si es azul o rosa

El aborto selectivo y la mortalidad de niñas por negligencia ha alcanzado máximos históricos en la India, según un estudio publicado recientemente por la ONG británica Action-Aid.
El informe Hijas desaparecidas realizado en cinco estados del noreste de la India revela que la diferencia entre niños y niñas ha vuelto a aumentar con respecto a las cifras del último censo estatal realizado en 2001.
Según reveló ya en 2006 el diario The Times of India, en el 80% de los distritos del país se ha producido un declive de la población femenina con respecto a la masculina desde inicios de los noventa. El descenso de la proporción de los sexos entre los infantes se acentúa paradójicamente en los centros urbanos más desarrollados y con mejor educación.
En una localidad del Estado de Punjab se han llegado a registrar sólo 300 niñas por cada 1.000 niños entre las castas altas.
La carga de las hijas
Ravinder Kaur, profesora de sociología en el Instituto Indio de Tecnología de Delhi y coautora del informe, señala que el mayor acceso a la tecnología que permite conocer con antelación el sexo del bebé, la formación de familias más pequeñas y la preferencia por el hijo varón son las principales causas de esta siniestra tendencia.
"El hijo varón perpetúa el linaje de la familia, ostenta su honor y además será el encargado de cuidar a los padres cuando éstos envejezcan", explica esta docente.
"Las hijas, en cambio, son percibidas como una carga porque todo lo que se invierte en ellas va a parar a la familia del marido, de manera que son como un fondo perdido.
Las viejas referencias se cruzan con las nuevas tecnologías y refuerzan el pasado frente al futuro", se lamenta la profesora Kaur.
La directora de la ONG Ekrata dedicada al avance de la mujer en la India, Rekha Bezboruah, también considera que "el consumismo que ha venido de la mano de la globalización se ha topado con una cultura patriarcal, de manera que una hija supone principalmente para los padres unos gastos inmensos para el pago de la dote, la celebración de la boda y su educación, además del miedo por su seguridad".
Las castas más bajas tienden a imitar el comportamiento de las altas. "En el estudio también hemos encontrado un incremento de la proporción niño-niña entre las castas más bajas, que antes no se veían tan afectadas por estos prejuicios y eran menos rígidas", explica la profesora Kaur.
Las castas inferiores cada vez celebran bodas más caras y se ven forzadas a pagar dotes más altas por las hijas, al igual que los ricos.
En 1994 el Gobierno indio lanzó la campaña Salvad a las niñas y prohibió a los médicos revelar a los padres el sexo del bebé tras efectuar la ecografía. Pero esta ley rara vez se cumple. A cambio de unas 5.000 rupias (80 euros) el médico regala a los padres un caramelo azul o rosa a la salida de la consulta.
También puede hacerles indicaciones como que su hijo será un valiente guerrero o bien que disfrutará jugando a las muñecas.
Palabras ligeras que en muchas ocasiones, sobre todo
en lo referente a los segundos hijos, conducen al feticidio de las niñas en clínicas abortivas o su muerte por envenenamiento o infección del cordón umbilical al nacer.
"El Gobierno ha puesto en marcha incentivos económicos destinados a las familias con hijas, sobre todo cuando éstas acceden a la educación. Pero el problema es si llegan a alcanzar a la población debido a la corrupción de este país. Además, los médicos forman un lobby muy poderoso en la India", asevera Bezboruah.
"Tiene que haber un cumplimiento más estricto de la ley. Si nosotros hemos encontrado a los médicos que revelan el sexo del bebé con la ecografía, ¿cómo no lo iba a hacer el Gobierno?", se queja la autora del informe.
Más mortalidad materna
"La solución pasa por mejorar la salud y la educación pública. Pero todavía tenemos un largo camino por delante, se trata de valores muy arraigados en la sociedad", añade la socióloga Kaur.
El feticidio femenino conduce además a otras trágicas consecuencias. "El aborto es una causa indirecta de la elevada mortalidad materna en la India", afirma Jorge Caravotta, especialista en supervivencia infantil en la sede de Unicef en Nueva Delhi.
"La escasez de esposas en estados como Haryana hace que los hombres tengan que comprar mujeres de otros lugares del país o incluso de otros países, como Bangladesh. Es muy común que se ejerza la violencia contra estas extrañas. La violencia aumentará en general al haber más competición por conseguir una esposa", señala con preocupación Kaur.
El propio primer ministro indio, Manmohan Singh, describió recientemente el aborto selectivo de niñas como una "vergüenza nacional" en una conferencia nacional que reunió a políticos, médicos y abogados.
La revista médica británica The Lancet publicó en 2006 que se habían producido diez millones de feticidios de niñas en la India durante los últimos 20 años.

Escuchar la televisión de fondo altera el desarrollo de los niños

REUTERS
NUEVA YORK.- Ni de fondo. La televisión no convence a los pediatras. Las críticas a contenidos concretos dejan paso a otras más genéricas.
El runrún de fondo que llega a los niños desprotegidos mientras juegan con sus muñecos también es perjudicial. Tanto, que daña su desarrollo y merma su capacidad para centrar su atención, tal y como recoge una investigación de la publicación 'Child Development'.
Los pediatras recomiendan que los menores de dos años no vean ningún tipo de programa de televisión, aunque tres de cada cuatro de los infantes norteamericanos viven en casas en las que el televisor está conectado la mayor parte del tiempo, tal y como señala el estudio liderado por la doctora Marie Evans Schmidt, del Centro de Medios y Pediatría del hospital infantil de Boston.
En un escenario controlado, los investigadores pusieron en observación a 50 niños, de 12, 24 y 36 meses, que se divirtieron durante una hora con juguetes apropiados para su edad. Durante media hora, una televisión estaba encendida en la habitación. Se emitía el popular concurso 'Jeopardy!', con sus respectivos anuncios. La otra media hora, el equipo de la doctora Evans apagó el aparato.
Los resultados no dejan lugar a dudas. Los científicos descubrieron que, cuando la televisión estaba encendida, el juego de los menores de todas las edades se interrumpía, incluso cuando la atención prestada al programa era escasa, mirando tan sólo unos pocos segundos cada vez que se distraían, un hecho que se producía como mucho una vez por minuto.
Con el televisor en funcionamiento, los periodos de juego eran más cortos y la atención se dividía entre los juguetes y la pequeña pantalla.
"La televisión de fondo desbarata los esfuerzos de los niños por mantener la atención en los juegos que desarrollan", ha explicado Schmidt.
"Incluso aunque los efectos descubiertos sobre el comportamiento en el juego son pequeños, podrían tener un impacto acumulativo a través de largas exposiciones en casa", ha manifestado la investigación. "Éstos podrían incluir un desarrollo cognitivo y lingüiístico más pobre, además de síntomas de déficit en la atención", advierten.
"La televisión de fondo es un riesgo ambiental en potencia si atendemos a la mayoría de los niños americanos. Los padres deberían limitar la exposición de sus niños pequeños", ha concluido Schmidt.







Localizan en el cerebro el lugar de la obsesión



Un grupo de científicos localizó una zona del cerebro que no se activa en las personas con desorden obsesivo-compulsivo (DOC) y en aquellas en riesgo de desarrollar la condición. El hallazgo permitiría diagnosticar el desorden debilitante mucho antes y evaluar mejor cómo están funcionando las terapias farmacológicas.
"El hallazgo principal es que en las personas con desorden obsesivo compulsivo y sus parientes sin afectar (por la enfermedad), parte de la corteza orbitofrontal no se activa como debería", dijo Samuel Chamberlain, experto en neurología de la University of Cambridge, quien dirigió el estudio. "Este es el primer estudio que identifica cerebros con fallas de activación en las personas en riesgo de padecer DOC", agregó.
El DOC es un desorden psiquiátrico de la ansiedad que se caracteriza por pensamientos e impulsos recurrentes y persistentes, como lavarse las manos una y otra vez descontroladamente.

Ahora enseñan cómo seducir mujeres

Dos jóvenes, asesorados por psicólogos cognitivo- conductuales y asesores de imagen, y basándose en libros de relaciones interpersonales de la escritora e investigadora norteamericana Leil Lowndes, fundaron Levantart. Por $ 300 mensuales, enseñan cómo encarar a la mujer deseada y lograr el objetivo de máxima: lle-vársela a la cama –aunque sacarle un beso también es un logro–. Dicen que ellas tienen otra manera de sentir y comportarse, y recomiendan usar esas diferencias a favor: escucharlas, detectar señales y, sobre todo, no demostrar demasiado interés y mucho menos, avidez sexual inmediata. Secretos de seductores.
Por Alejandro Gorestein

Practica.
Se hace en discotecas, en serio y trago en mano.
El escenario es un boliche en plena madrugada. Un hombre se acerca tímidamente a esa mujer que flechó desde que llegó. A su lado, un profesor especializado en seducción lo alienta y le recuerda al oído los últimos consejos para no fracasar a la hora de lograr el objetivo: un beso.
Estas academias que enseñan las claves para conquistar chicas son una tendencia mundial y el negocio del marketing de la seducción alimenta la esperanza y la ilusión de miles de tímidos y loosers que todos los fines de semana vuelven solos y tristes a sus casas.
Basados en los libros de relaciones interpersonales de la escritora e investigadora norteame-ricana Leil Lowndes y en otros ensayos y foros de seductores de todo el mundo, Martín Herrera y Mike Tabaschek fundaron www.levantart.com.ar. Esta novedosa academia cuenta con un equipo de profesionales que va desde psicólogos cognitivo-conductuales, pasando por asesores de imagen/estilo y docentes capacitados en el arte de seducir.
Las clases, que se desarrollan una vez por semana con dos salidas nocturnas y cuestan $ 300 por mes, apuntan a promover el aprendizaje de las habilidades sociales que permitan utilizar la comunicación verbal y no verbal para poder besar y acostarse con una mujer. “Nosotros les enseñamos que las mujeres son otro género, que tienen otra manera de comportarse, son más emocionales”, expresó Herrera.
Para ello hacen hincapié en los llamados tests que permiten descifrar el nivel de comodidad que tienen las mujeres ante una situación de levante. Por eso aconsejan que si ellas no están cómodas dando la mano, tendrán muchas menos ganas de ser besadas. Otra recomendación consiste en realizar acercamientos previos como olerles el cuello, prestando atención a sus inmediatas reacciones.
En los foros de la web ya hay opiniones, a favor y en contra. “La verdad es que hice clases teóricas y unas prácticas junto a un amigo, pero no me sirvió de mucho. No creo que necesite que alguien me diga cómo encarar a una mujer”, dijo Julián, de 21 años.
“El curso me hizo bien anímicamente. Me enseñó a mostrarme tal cual soy, sin fingir un personaje ni siendo tan ansioso. No voy a decir que todos los sábados me voy con una mujer del boliche, pero tampoco me puedo quejar”, afirmó Diego de 32.
Los profesores de seducción distinguen tres clases de alumnos: El “clásico langa”; los que siempre caen en la temida zona del “quiero que seamos amigos”; y el tímido que no encara y espera que ella lo encare.
“Los hombres tienen que hablar más de las emociones porque las mujeres, aunque sea sólo una noche, buscan intercambio de energía. No deben ser tan racionales ni decir el clásico: ‘¿Querés que te invite un trago?’ o ‘¡Qué linda que sos!’”, aconsejó Tabaschek. “Hay que escucharlas a ellas. Si una mujer dice: ‘Me olvidé de regar las plantas’, eso es una señal y hay que hablarle de plantas”, agregó.
Desafiando las creencias populares, para estos seductores las mujeres argentinas no son histéricas, sino que responden con una actitud defensiva y a veces agresiva ante el constante acoso y piropeo de hombres que fracasaron en sus técnicas para llevarlas a la cama.
Por eso, insisten en que lo importante “es no demostrar un interés sexual inmediato por la otra persona. Primero hay que lograr que ella entre en confianza con uno y que sea ella la que demuestre el interés. Recién en ese momento el hombre podrá recompensarla mostrándole el suyo”.

“Hacerse el desprotegido”
Por Cacho castaña*
“Nunca me puse a pensar que una academia pudiera enseñarnos a los hombres a seducir a las mujeres. No creo que se pueda aprender mucho en el corto plazo, a lo mejor sí con el tiempo.”
“Pienso que seductor se nace, aunque tal vez estos cursos puedan ser útiles para aprender diferentes comportamientos sociales. Igualmente estoy convencido de que la que seduce es siempre la mujer. El hombre recién se tira a la pileta cuando está seguro de que va a ganar, y eso se intuye. Siempre dependemos de la mujer.”
“Para mí es necesario mentirle a la mujer para conquistarla porque eso es parte de la seducción. Cuando uno conoce a una mujer y te cuenta que le gusta el cine romántico hay que decirle que a uno también. Pasados los seis meses de relación hay que sincerarse y confesarle que nuestro amor por el cine romántico fue simplemente una herramienta para seducirla, que no cambiamos en nada, que somos los mismos que hace seis meses atrás.”
“Mi consejo a la hora de conquistar a una mujer es siempre hacerse el desprotegido, con eso la cosa puede caminar”.

La música alta acelera el consumo de alcohol


EUROPA PRESS
MADRID.- La música alta en los bares conduce a un mayor consumo de alcohol en menos tiempo, según un estudio de la Universidad de Bretagne-Sud en Francia que se publica en la revista Alcoholism: Clinical & Experimental Research.
Según explica Nicolas Guéguen, director del estudio, "la investigación previa había mostrado que la música rápida puede provocar un consumo rápido y que la existencia de música frente a su ausencia hace que una persona pase más tiempo en el bar". En relación al estudio actual, Guéguen señala que es el primero que utiliza un método experimental en un contexto real y descubre efectos de la música alta sobre el consumo de alcohol.
Los investigadores visitaron de incógnito dos bares durante tres noches de sábado en una ciudad de tamaño medio del oeste de Francia. Los sujetos del estudio, 40 hombres entre los 18 y los 25 años, no sabían que estaban siendo observados y sólo se incluyó a aquellos que pidieron un vaso de cerveza de barril.
Con el permiso de los propietarios del bar, los investigadores manipularon de forma aleatoria los niveles de sonido de la música antes de elegir a los participantes. Después de que el participante observado dejara el bar, los niveles de sonido eran seleccionados aleatoriamente de nuevo y se elegía a otro participante.
Los resultados mostraron que los niveles elevados de sonido conducían a un mayor consumo de alcohol en menos tiempo.
Posibles causas
Los investigadores ofrecen dos posibles hipótesis sobre por qué podría ocurrir esto. Por un lado, de acuerdo con investigaciones previas sobre música, comida y bebida, los niveles de sonido altos podrían haber provocado un aumento del umbral que conduce a los sujetos a beber más rápido y pedir más bebidas. Por otro lado, la música alta podría haber tenido un efecto negativo sobre la interacción social en bar, así que los clientes bebían más porque hablaban menos.
Guéguen añade que en Francia más de 70.000 personas al año mueren debido al consumo crónico de alcohol, al que se asocian la mayoría de accidentes de coche con resultados mortales.
"Hemos mostrado que la música ambiental que sonaba en un bar estaba asociada con un aumento del consumo de alcohol. Necesitamos animar a los propietarios de los bares a poner la música a un nivel moderado y advertir a los consumidores de que la música alta puede influir en su consumo de alcohol", concluye el investigador.

Los genes no lo son todo



Descubrir que no tenemos muchos más genes que un gusano o que una mosca fue un duro golpe para el orgullo sapiens y quizá también para los científicos que pensaban que el ADN brindaría todas las respuestas sobre la condición humana. Aquello de “es genético” o “tiene el gen de…” dejó de tener demasiado sentido ya a principios del milenio con la secuenciación del genoma humano. Y cada vez está más claro que lo que cuenta no es el ADN y su configuración, sino lo que lo rodea. La realidad es que no somos lo que está escrito en nuestros genes, sino lo que hacemos con ellos. La realidad es que podemos introducir cambios en nuestro genoma, y, lo que es aún más impactante, las modificaciones que introduzcamos pasarán a los hijos y a los nietos.

Lo realmente importante para la vida no es la composición de la doble hélice, si tenemos tal o cual gen, sino qué genes están encendidos y cuáles apagados. Una de las pruebas más palpables y sobre todo visibles de este hecho la obtuvieron Randy Jirtle, un investigador de la Universidad Duke (Estados Unidos), y su equipo. Sus ratones fueron concebidos, nacieron y crecieron en el laboratorio de Jirtle, y aunque parezca increíble son genéticamente idénticos, la composición de su ADN es exactamente la misma. La única y fundamental diferencia entre el rechoncho y amarillo roedor y su marrón y estilizado hermanito se encuentra en las condiciones en las que discurrió su gestación.
“¡Los genes no son el destino! Las influencias medioambientales, entre las que se incluyen la nutrición, el estrés y las emociones, pueden modificar esos genes sin alterar su configuración básica”, escribe, en La biología de la creencia, Bruce Lipton, un biólogo molecular estadounidense que en su libro defiende la capacidad que tiene el ser humano para intervenir y modificar su biología. La consecuencia última de la visible diferencia va más allá de la estética, porque el animal amarillo desarrollará obesidad mórbida, diabetes y muy probablemente morirá de cáncer, mientras que su hermano marrón tiene todos los elementos para vivir una vida sana y tranquila.
El experimento de Jirtle ha puesto en juego elementos que intervienen en la vida cotidiana de los humanos, y aunque los investigadores son prudentes a la hora de trasladar las conclusiones de una especie a otra, admiten que cada vez hay más datos que indican que lo que se ha observado con los ratones amarillo y marrón podría extrapolarse a los humanos. En una primera parte del experimento, el equipo de la Universidad Duke expuso a hembras de ratón en gestación a un agente químico, el BPA, que forma parte del plástico que se encuentra en todas las casas (envases, recipientes, biberones, etcétera). Todos los vástagos que nacieron eran amarillos, o, lo que es lo mismo, con predisposición a sufrir las enfermedades mencionadas.
En la segunda parte del estudio nacieron los ratones mencionados. Los dos de la misma madre y con la misma carga genética. Durante la gestación del roedor amarillo, la madre recibió el BPA y una dieta normal. Sin embargo, durante la gestación del marrón, la progenitora, que también recibió el compuesto del plástico, siguió una dieta especial enriquecida con ácido fólico y genesteína, un folato presente en la soja.
El resultado exterior está a la vista, pero vayamos al interior de las células para ver lo que ha provocado esa diferencia entre hermanos genéticamente idénticos. Lo ocurrido es tan simple como el mecanismo de un interruptor de la luz. En este caso, la bombilla sería un gen asociado con la obesidad, la diabetes y el cáncer. El interruptor de encendido, el BPA; el de apagado, la dieta. Es decir, que aunque el componente plástico tiene un efecto tóxico que enciende el gen patológico, con la dieta se ha logrado eliminar. Todo ello se produce a través de una serie de marcas químicas que cuando están presentes en la estructura del gen lo inactivan.
En lo que se refiere a los humanos, recientemente se ha publicado un nuevo estudio en Proceedings of the National Academy of Science, de Estados Unidos, en el que se ha visto cómo pacientes con tumores de próstata lograron apagar dos familias de genes que favorecen la enfermedad. El apagado se produjo tras tres meses de un estilo de vida diferente: llevaron una dieta baja en grasas, con alimentos no procesados y verduras; practicaron técnicas de control del estrés y ejercicio físico, y, por último, también se ocuparon de su mente, asistieron a grupos de apoyo psicosocial –se sabe que el estrés psicológico provoca el encendido y apagado de genes–. Las conclusiones del trabajo son preliminares, pero están en consonancia con las de otros similares, de modo que el camino parece ser el adecuado.
“Hay que luchar contra el determinismo genético. El genoma nos da una tendencia a ser de cierta manera, pero es cómo vivimos lo que hace que seamos de una forma determinada”, explica Manel Esteller, director de epigenética del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (Madrid) y del Instituto Catalán de Oncología (Barcelona). Esteller es un reconocido experto en epigenética. Esta disciplina, con poco más de una década de existencia, es una auténtica revolución en la biología; algunos la llaman el segundo genoma o el interlocutor entre genoma y ambiente. La epigenética ha podido dar respuestas donde la genética ya no tenía ninguna: por qué los ratones idénticos genéticamente son tan diferentes, por ejemplo. “La diferencia entre genética y epigenética probablemente puede compararse con la diferencia que existe entre escribir y leer un libro. Una vez que el libro ha sido escrito, el texto (los genes) será el mismo en todas las copias. Sin embargo, cada lector podría interpretar la historia del libro de una forma ligeramente distinta, con sus diferentes emociones y proyecciones, que pueden ir cambiando a medida que se desarrollan los capítulos”, comenta Thomas Jenuwein, investigador austriaco.
No tan espectaculares a la vista como los ratones americanos, pero tanto o más significativos, son los resultados del grupo de Manel Esteller. Sus investigaciones con personas genéticamente idénticas son conocidas en todo el mundo por su importancia y trascendencia. El investigador español ha estudiado a decenas de parejas de gemelos de distintas edades, y ha podido observar cómo la forma de vida va dejando sus huellas en el ADN en forma de genes que se encienden y se apagan. Un solo dato ilustra bastante bien los hallazgos de Esteller: las diferencias en las marcas químicas presentes en los genes –cambios epigenéticos– de gemelos de 50 años son cuatro veces mayores que las que se pueden encontrar en gemelos de sólo tres años. Además, la disparidad aumenta a medida que aumentan las diferencias en el estilo de vida.
Obviamente, la influencia de la epigenética en nuestras vidas no se limita a las patologías como el cáncer, que es el principal objetivo de Manel Esteller, sino que condiciona el proceso de envejecimiento, el comportamiento y, por supuesto, la salud emocional y mental. “Estamos estudiando la enfermedad de Alzheimer, y hemos encontrado que el patrón epigenético [las marcas químicas en el ADN] de un cerebro con esta patología es diferente del de uno sano”, explica Esteller. También en las cada vez más frecuentes enfermedades autoinmunes se han observado cambios epigenéticos que hacen que algunos genes se expresen, y que, por tanto, se produzca una respuesta inmune contra el propio organismo. Tampoco los trastornos cardiovasculares escapan a esta sutil marca.
Sin embargo, lo más importante y trascendente es que todos los cambios epigenéticos se transmiten a las generaciones futuras. Son ya famosos los experimentos con ratas de Michael Meaney de la McGill University de Montreal (Canadá), en los que se vio que cuando las hijas de madres descuidadas y poco amorosas eran criadas por ratas cariñosas y afectivas, la herencia genética quedaba de lado, y cuando esas hijas se convertían a su vez en progenitoras, se comportaban como sus madres adoptivas y no como las biológicas. Dicho de otro modo, la herencia no es ni mucho menos una fatalidad porque es posible cambiarla.
En el caso de los humanos, algunos estudios de poblaciones han encontrado que el tipo de alimentación de los abuelos tiene un efecto sobre el riesgo que tienen los nietos de desarrollar diabetes o enfermedades cardiovasculares. De modo que no sólo somos lo que comemos nosotros, sino lo que comieron, lo que respiraron, lo que sintieron…nuestros ancestros. Hasta ahora estas tendencias no tenían una confirmación biológica, pero “cada vez hay más datos que sugieren que la epigenética sana se transmite a las generaciones futuras, y la alterada, también”, asegura Esteller. O sea, que aquello de “mi cuerpo es mío y hago lo que quiero” está muy bien, pero hay que tener en cuenta que los descendientes también van a sufrir los excesos o a beneficiarse de los cuidados. Como ha dicho un conocido genetista del University College London, “todos somos guardianes de nuestro genoma”.
De hecho, la epigenética, además de su impacto directo en nuestras vidas, remueve los cimientos de la mismísima teoría de la evolución. Parece que Charles Darwin no tenía toda la razón. Por su parte, el despreciado Jean-Baptiste Lamarck, un naturalista francés ligeramente anterior a Darwin, que de alguna manera ya había descrito la epigenética en el siglo XIX, debería obtener finalmente su lugar en el olimpo científico. Para Darwin, los cambios en el ADN que se dan en el proceso evolutivo son fruto del azar, mientras que Lamarck sostenía que se producen debido a la interacción con el medio ambiente y a la adaptación a él. Los seguidores de Darwin despreciaron y casi borraron de la historia de la ciencia la teoría lamarckiana, hasta que las investigaciones epigenéticas aparecieron en escena y comenzaron a dar pruebas objetivas de su validez. “Lamarck no debería haber sido tan denostado”, opina Esteller.
Continuando con la idea de modificar la biología, Bruce Lipton, en el libro mencionado anteriormente, va un paso más allá en las implicaciones de la epigenética y la pone en relación con el cerebro y el poder de la mente para producir cambios biológicos. El denominado efecto placebo es el más claro de ellos: un alto porcentaje de pacientes se curan porque creen que están recibiendo un medicamento cuando lo que están tomando es un simple caramelo. El científico estadounidense menciona el caso de una mujer que participaba en un ensayo clínico con un antidepresivo y que mejoró espectacularmente de una depresión de años. La participante no recibía el antidepresivo, sino placebo, pero lo destacado del asunto es que las pruebas de imagen mostraban que la actividad de su cerebro había cambiado. La biología respondió a algo tan inmaterial como la sugestión o el pensamiento. Y para ilustrar que lo contrario también se cumple, el caso de un hombre que, tras ser diagnosticado de cáncer de esófago y haber recibido los tratamientos pertinentes, muere tal y como sus médicos le habían asegurado y vaticinado. Lo curioso del caso es que cuando le practicaron la autopsia no encontraron suficientes signos de cáncer como para haberle causado la muerte. Uno de los terapeutas que le atendieron dijo en un programa de Discovery Health Channel: “Murió con cáncer, pero no de cáncer”.
“Uno de los privilegios de ser un humano es que podemos hacer real nuestro pensamiento”, explicaba Joe Dispenza, bioquímico estadounidense especializado en el funcionamiento de la mente, en una entrevista realizada durante la presentación en España de su libro Desarrolla tu cerebro. La ciencia de cambiar tu mente. “De igual modo, el cerebro cambia como resultado del pensamiento”, añadía.
Lo que propone Dispenza para utilizar la mente en nuestro beneficio, tanto físico como psíquico, tiene mucho que ver con lo que hicieron los individuos con tumores de próstata: cambiar el estilo de vida. “Si pensamos siempre de la misma manera y nos comportamos de la misma manera, el cerebro no cambia. Lo que tenemos que hacer es forzar al cerebro a activarse de forma diferente”. La idea biológica que subyace a esta afirmación es que es necesario romper los hábitos, proponerse actuar, pensar e incluso sentir de una manera distinta a la habitual. De este modo se estimula la creación de nuevas conexiones neuronales a la vez que se debilitan las que nos mantienen en el mismo círculo de repeticiones. En una ocasión, un neurocientífico de la Universidad de California en San Francisco, Michael Merzenich, explicó que en cada momento elegimos cómo va a funcionar nuestra hiperflexible mente y así elegimos quién seremos en el momento siguiente. Efectivamente, la clave de esta posibilidad para modelar el cerebro está en su enorme elasticidad. La misma que nos permite aprender sin cesar y que también reorganiza todo cuando una de las áreas no funciona para que otras asuman al menos una parte de su trabajo.
Existe un cada vez más nutrido grupo de investigadores que estudian los aspectos más misteriosos del cerebro, como la conciencia, los límites de la mente y esa capacidad para cambiarse a sí mismo que tiene efectos sobre la biología. Ahí entran los numerosos experimentos que se han realizado en torno a la meditación, las terapias conductistas y la visualización, entre otras. Sin embargo, siguen siendo cuestiones controvertidas, y muchos neurocientíficos prefieren no entrar en ellas por considerar que no son materia de ciencia. Se ha dicho muchas veces que éste es el siglo del cerebro, de modo que es de esperar que, al igual que la epigenética ha aparecido para cubrir las lagunas que dejaba la genética, surja una epineurología (epi, prefijo griego que significa sobre o por encima).

CHESS BOXING:Mover la reina y noquear

Nikolay Sazhin piensa y pega fuerte. O viceversa. Es el nuevo campeón mundial de Chess Boxing, un deporte que combina unos rounds de pugilismo con el esfuerzo intelectual de una partida de ajedrez.

El pasado 5 de julio, este estudiante de matemáticas de 19 años se sentó en un ring de Berlín ante miles de fans enfervorizados para noquear a su oponente, Frank Stoldt, de 37 años, después de comerse a la reina en el quinto asalto al tablero.
Se hizo con el título de una disciplina, que curiosamente cuenta ya con más de 150 profesionales. Muchos de ellos pertenecientes a la Organización Mundial de Chess Boxing (WCBO, en inglés), que se define como "un club de lucha intelectual", con sede en Berlín y clubes de entrenamiento en la ciudad alemana, Londres y Sofía (Bulgaria).
"Se trata de combinar el deporte que hace pensar más con el número 1 de la lucha", comenta su creador, Iepe Rubingh, de 32 años, que se inspiró en el cómic francés La trilogie Nikopol, de Enki Bilal, para hacer realidad lo que algunos califican ya de "biatlón fisicointelectual."
Las reglas del juego no son complicadas pero sí exigentes con los competidores, que tienen que alternar rounds de cuatro minutos de ajedrez y rounds de tres minutos de boxeo, con un minuto de descanso de por medio para quitarse los guantes y volver a colocar el tablero en el ring. Así hasta los 11 asaltos.
El ganador es el que consigue dejar K.O. a su oponente en cualquiera de las partes del juego."Si te despistas un momento, en el ring o el tablero, se acaba el juego", comenta el portavoz de la WCBO, Andreas Dilschneider.
"Las dos disciplinas son agresivas", remata Stolz, policía, jugador compulsivo de ajedrez, kickboxer amateur y campeón de Chess Boxing en la categoría de pesos pesados en 2007.
Este mes ha tenido que ceder su cinturón a Sazhin, que descubrió este deporte a través de Internet y se entrenó al ajedrez online. El creador del Chess Boxing cree que el chico promete.
Además del título y el cinturón, Sazhin también consiguió un premio en metálico, aunque Rubingh no quiso revelar de qué cantidad. "No es nada comparado con el boxeo profesional", confesó.

Enciclopedias online , un reino del absurdo para todos los gustos



Las enciclopedias libres online resultan un proyecto cada vez más ambicioso y extraño, cabe añadir.
Este submundo del conocimiento en la Web tiene incluso capítulos desopilantes dedicados a los argentinos.
En el sitio Inciclopedia, por ejemplo, los internautas se despachan así sobre algunos aspectos del país: "La tierra de la Argentina es, sin dudas, según su gente, la mejor del mundo: basta con plantar unos cables para que salga un árbol de electrodomésticos".
Las compilaciones enciclopédicas enriquecidas con los aportes de los usuarios de todo el mundo se expanden cada vez más hacia el campo del absurdo, de las obsesiones, del humor, y temas tan específicos como la serie de películas de la Guerra de las Galaxias : su sitio es Wookieepedia.
El más conocido de estos sitios enciclopédicos es Wikipedia, con millones de usuarios, que se actualiza continuamente y que, en general, podría enrolarse entre las páginas "serias". Para darse una idea del impacto de este sitio, el jueves 26 de marzo pasado se creó el "decimomillonésimo" artículo sobre un pintor y orfebre inglés. Y el año próximo se realizará en Buenos Aires la convención internacional de este sitio: Wikimanía.
Pero, a la vez, existe un furor del enciclopedismo bizarro e hiperespecífico que se agrupa en cientos de direcciones, de las cuales participan miles de personas sin que deba acreditarse ningún tipo de credencial. Para amantes de la pizza
Estos sitios superaron, sin duda, cualquier experiencia anterior de escritura mancomunada. Un usuario que considere importante aportar algo sobre cualquier cosa, simplemente, lo sube a la Web. Y allí está, por ejemplo, Pizza-pedia, la primera enciclopedia de la pizza con recetas en inglés, una historia del plato y la temperatura actual en Nápoles para que los más obsesivos del tema no se pierdan detalle.
En esta categoría podría ubicarse también a Wikihow, una especie de enciclopedia práctica para resolver situaciones cotidianas. Por caso: "cómo relacionarse con los vecinos molestos"; "cómo fabricar una puertita para que el gato entre y salga del hogar sin crear problemas" o, tal vez, el extremo: "cómo acompañar a alguien que está convaleciente sin quedar como un insensible".
¿Quién no cree que el mundo de las manualidades con mimbre está un poco desordenado? Algo similar deben haberse preguntado los creadores de Wickerpedia: una enciclopedia monomaníaca sobre las posibilidades de las ramas del árbol del mimbre. Ofrece 52.000 artículos en español, y en inglés, 601.000, nada menos.
El derrotero por estas compilaciones en la Web casi no tiene fin. La serie o sitcom norteamericana Lost ya cuenta con su enciclopedia: Lostpedia. En ella los interesados pueden encontrarse con detalles de los personajes e información sobre todas las temporadas de esta serie vista por 16 millones de personas sólo en los Estados Unidos.
Precisamente, en ese país la afición por las enciclopedias online parece un deporte. Y hay una en particular que no tiene desperdicio: "Conservapedia".
Dedicada exclusivamente al pensamiento conservador norteamericano, incluye artículos sobre "la enfermedad de la homosexualidad", rechazos a las teorías de la evolución y artículos políticos contra el candidato demócrata Barack Obama. "El control de armas es sólo un programa social destinado a aumentar la dependencia emocional y física de todos los votantes de la seguridad que pueda otorgar un gobierno", dice un artículo en favor de la portación civil de armas.
El punto más alto de este tipo de sitios es Frikipedia. Y así se presenta: "Este sitio consiste en un montón de conocimientos aleatorios, inconexos y de mal gusto donde pasarlo bien, colaborando entre todos e intentando en vano escribir sobre la sapiencia humana, echando unas risas en el intento".
Entre las recomendaciones para participar, los creadores sugieren que "lo aleatorio es un buen comienzo, pero siempre es poco y queremos artículos largos". Sobra decir que abundan los textos cortos sin ningún tipo de sentido estricto, pero muy cómicos a la vez.
Detrás de todos estos emprendimientos está la tecnología o software wiki, una palabra hawaiana que significa rápido, y que permite la creación de contenidos en forma mancomunada.
Para concluir vale una reflexión de Inciclopedia sobre la Argentina: "Sus habitantes -cuenta el capítulo un artículo de la sección Sociedad- son capaces de debatir sobre política, economía, absolutamente cualquier deporte, asuntos sociales, militares, religiosos, teoría del caos, física cuántica y secuencias exponenciales. Lo curioso de estos seres tan extraños es que, aunque piensan absolutamente diferente, todos creen tener la razón".
Por Franco Varise De la Redacción de LA NACION

Logran el primer embarazo por vitrificación

Por Sebastián A. Ríos De la Redacción de LA NACION
Tras cuatro años de buscar sin éxito un embarazo, una mujer de 36 años se ha convertido en la primera argentina en lograrlo gracias a la vitrificación. Se trata de un nuevo método para preservar en frío óvulos y embriones para su posterior utilización en tratamientos de fertilización asistida.
"En el caso de los embriones, la vitrificación permite ofrecer a las pacientes una tasa de embarazo de entre el 30 y el 35%, mientras que las técnicas convencionales de criopreservación ofrecen tasas del 20%", dijo a LA NACION el doctor Guillermo Speranza, director del Centro Argentino de Fertilidad, que llevó adelante el tratamiento.
La vitrificación consiste en el congelamiento ultrarrápido de los embriones resultantes de los tratamientos de fertilización asistida, lo que permite diferir su implantación en el útero materno. Pero también permite la preservación en frío de los óvulos, algo en lo que fallan las técnicas convencionales de preservación en frío o criopreservación.
Si bien el procedimiento de vitrificación que se emplea en la actualidad fue desarrollado con el objetivo de preservar la capacidad reproductiva de las mujeres que debían ser sometidas a tratamientos oncológicos, en la actualidad también se usa en aquellos casos en que deciden posponer la maternidad, o en los casos en que se quiere conservar óvulos u embriones obtenidos mediante procedimientos de estimulación hormonal o de fertilización asistida, respectivamente, para evitar repetirlos en futuros intentos.
En este caso, ejemplificó el doctor Speranza, "fueron vitrificados seis embriones que habían sido obtenidos en un tratamiento previo de fertilización asistida, que no había dado resultado. Dos meses después de ese tratamiento, se descongelaron tres de los embriones vitrificados, se los transfirió a la paciente y se logró un embarazo gemelar".
La fecha probable de parto es enero de 2009. La semana pasada, comentó el doctor Ramiro Quintana, también director del Centro Argentino de Fertilidad, lograron otro embarazo a partir de embriones vitrificados. "Pero todavía no lo hemos confirmado en forma ecográfica", aclaró. Derribar barreras
Las técnicas de vitrificación fueron desarrolladas con el objetivo de salvar un obstáculo contra el que chocaban las técnicas convencionales de congelamiento de óvulos. "El 60% de un óvulo es agua, que al congelarse forma cristales de hielo que dañan las estructuras internas de las células", explicó Speranza.
Eso no ocurría con los embriones, de ahí que las técnicas de criopreservación se hayan aplicado para esos casos, lo que dio lugar a un amplio debate ético.
"La vitrificación es un proceso de congelación ultrarrápida que, a diferencia de la congelación lenta que se hace habitualmente, evita la formación de hielo en el interior de la célula [el óvulo]", completó Quintana.
Según Masashige Kuwayama, director científico de la Clínica de Mujeres Kato, de Tokio, Japón, y creador de la actual técnica que vitrificación, "el 98% de los óvulos sobrevive a los procesos de vitrificación y de descongelamiento. Eso permite obtener tasas de embarazo similares a las que se obtienen con óvulos sin congelar".
El primer embarazo obtenido mediante la técnica desarrollada por Kuwayama ocurrió en 2005. Cuando este investigador presentó su técnica en Buenos Aires en marzo último, en el marco de un simposio organizado por la Sociedad Argentina de Medicina Reproductiva (Samer), había poco más de 400 bebés nacidos gracias a la vitrificación. Hoy, son más de 600.
"Creo que la vitrificación va a ser una técnica que va a ocasionar cambios en los próximos tiempos -opinó Quintana-. Y no tanto en lo que respecta a la vitrificación de embriones, sino a la de óvulos. Ya que si sigue mostrando las tasas de embarazo que ha mostrado hasta ahora, la vitrificación de óvulos podría reducir el número de embriones congelados."

miércoles, 23 de julio de 2008

¿Una pastilla contra el SIDA?

Expertos sudafricanos estudian la posibilidad de que homosexuales y bisexuales tomen a diario fármacos antirretrovirales que normalmente consumen las personas que ya padecen HIV para prevenir la enfermedad.
De este modo se realiza la profilaxis previa."Son etapas muy iniciales pero es muy emocionante. Es otra estrategia que nos brinda la esperanza de que quizá se le pueda ganar a esta epidemia", declaró Linda Gail Bekker, una de las investigadoras, durante la presentación del estudio y agregó: "No creo que sea la salvación. Lo dudo. Pienso que será, con suerte, otra estrategia en nuestro arsenal”.
Si bien intervienen Brasil, Ecuador, Perú, Tailandia y Estados Unidos en la experimentación, el país elegido a la hora de aplicar la teoría se practicará en Sudáfrica e incluirá a 3.000 varones que corran riesgo por mantener sexo con otros hombres, según publica La Tercera de Chile.

Autoayuda, el paso previo a los psicofármacos

“Llega un momento en el que no se puede más y se pasa del libro de autoayuda al psicofármaco”, asegura Vanina Papalini, investigadora del Conicet y especialista en comunicación que acaba de doctorarse en la UBA y en París VIII con un trabajo dedicado a los libros de autoayuda como género literario.

Sobre el valor de esos textos en la construcción de un sujeto aislado y omnipotente, la demonización del conflicto y la exaltación del éxito asociado al dinero como valor máximo habla en esta charla con Crítica de la Argentina.
–¿Qué características tiene como género la literatura de autoayuda?–
Son libros orientados a la subjetividad de la persona y esta dimensión, para los autores de los libros de autoayuda, es la clave de resolución de los problemas de todo tipo que puedan experimentarse. Tanto los que podemos llamar emocionales o de relaciones con los demás, como aquellos que uno podría considerar más estructurales, relativos a las modalidades de trabajo, son pensados como posibles de ser resueltos por el individuo mismo, sin la intervención de ninguna otra persona ni con la transformación de ninguna otra condición.
–¿Qué particularidades tienen los libros de autoayuda argentinos?–
No tienen ninguna particularidad en especial, y tienen la característica de preparar al sujeto para unas condiciones de vida globales. Esto es: la enorme flexibilidad de empleo y un escenario de cambio constante que implican un costo emocional muy grande por esta situación permanente. Lo construyen como un sujeto simpático que siempre va a mostrar un rostro sonriente a pesar de cualquier situación que ocurra. En ese sentido, trabajan sobre una hipocresía funcional. Que mueve a no mostrar, a guardar en lo más hondo los propios sentimientos. Construye a un individuo que siempre tiene ganas de actuar y de hacer y que se autoexige un montón, al punto de que se considera omnipotente para poder resolver todas las situaciones. Como contracara, aparece el hecho de que las personas hacen el esfuerzo por cumplir con todos estos mandatos, que los libros plasman pero que son sociales, y llega un momento en el que no se puede más y se pasa del libro de autoayuda al psicofármaco.
Así se puede estar siempre en actividad, diluir toda tristeza y toda preocupación, para mostrar siempre la mejor cara y poder seguir actuando.
Uno de los libros de autoayuda que vendió mucho en el último tiempo es Padre rico, padre pobre. –¿Y qué puede decir sobre ese libro? –
Trabaja sobre la idea de que siempre se puede ser un triunfador y que esto depende de uno mismo. En ese sentido, uno es dueño de su propio destino y ni siquiera el lugar de nacimiento, la familia, la educación que recibió, son condicionamientos fuertes. Es el mito del self made man, pero traducido a la época actual y con elementos novedosos.
Entre estos libros, algunos tienen características más espirituales, y rondan la zona new age, y otros, no; son mucho más descarnados. Tienen la forma de un manual, incluso te dan una serie de pasos escritos de cómo lograr la disolución de los malestares y cómo solucionar los problemas cotidianos. Pero al mismo tiempo que ha crecido el consumo de los libros de autoayuda, también creció el consumo de psicofármacos de una manera bastante importante, y creció la cantidad de la población que se considera afectada por la depresión, que es una enfermedad de límites muy imprecisos, y que nadie sabe con exactitud si es una patología o no y en qué punto deja de ser una sensación de tristeza para convertirse en una enfermedad.
Es muy fácil medicarla porque no está muy claro el límite entre lo patológico y lo que no lo es. Y el consumo de psicofármacos ha crecido de manera notable para gran alegría de la industria farmacéutica.
–¿Cómo es la construcción de la subjetividad que proponen esos libros? –
Sobre todo trabajan sobre la idea de un individualismo omnipotente. Al punto de enseñar a no prestar atención a los comentarios que los otros ofrecen sobre uno mismo. Es como un individuo cerrado que se forma una imagen positiva de sí mismo con prescindencia de lo que puedan opinar a su alrededor. En ese sentido es bastante terrible, por más que pueda tener efectos positivos sobre la autoestima, porque crea una especie de sordera y de aislamiento. Uno deja de interactuar con los otros, en la medida en que ponen en riesgo nuestra propia imagen del yo. No es seguro que esto se produzca de esta manera, a pesar de que los libros tengan esta tendencia, porque las personas mantienen una vida social bastante amplia en la Argentina. Creo que todo lo que sea grupal o social, o gratuito, y que no tenga como finalidad el éxito va en contra de esta tendencia dominante.
–¿Y por dónde pasa el éxito en estos libros?–
El individuo se siente realizado si ha tenido éxito económico. En el caso de que no le haya ido bien en lo económico, el segundo nivel es sentirse bien consigo mismo, pero está muy lejos del anterior. Y la idea de competencia atraviesa todo esto con una ideología bastante antigua que es la del darwinismo social. No hay ningún condicionamiento ético que pueda limitar las acciones para ganar en esta competencia loca.
–¿Recuerda un ejemplo de algún libro?–
El libro ¿Quién se ha llevado mi queso?, que también tuvo bastante renombre en su momento, plantea la situación de dos ratones a los que de un día para otro les desaparecieron un queso que tenían en un lugar, y uno no quiere no salir a explorar los laberintos para encontrar queso y el otro sí porque cree que si no se van a morir de hambre. Y en un momento, el segundo abandona al primero y sale para salvarse a sí mismo. Esto de alguna manera concentra la idea que se quiere transmitir: que al final se trata de salvarse solo y no importa qué es lo que está ahí atrás.
–¿Qué rol cumple la comunicación?–
Cumple un rol fundamental, y es pensada como la manera de resolver la mayor parte de los problemas porque se presupone que no hay desacuerdos esenciales. Se trabaja sobre la idea de que éste es el mundo existente, se trata de adaptarse del mejor modo posible, y la conversación apunta a ponernos de acuerdo en un objetivo que ya está predeterminado y es igual para todos. Es decir, son libros que descartan la idea de disenso, de confrontación de ideas y que ven en eso un elemento amenazador. El que confronta o no está de acuerdo está por fuera del sistema y no interesa retenerlo. También en este sentido se avanza hacia un mundo mucho más homogéneo en términos de los modelos a alcanzar y las metas a conseguir, y en el que hay una desaparición y una demonización del conflicto.