jueves, 11 de febrero de 2010

En París y en Baires todos dicen “te amo”

En París, una de las ciudades más románticas del mundo, nadie se va a quedar este 14 de febrero –Día de los Enamorados– con el corazón en la boca, sin decirle lo que siente a la persona que le gusta, por más tímido que sea.
La municipalidad de la capital francesa ofrecerá para esa fecha un original servicio por el cual 173 carteles luminosos estarán a disposición de las mil veces postergadas declaraciones de amor que nunca se dijeron cara a cara, por más lugares espectaculares que tenga la Ciudad Luz para haberse atrevido.
Menos sensible, la administración porteña dejará pasar el día sin pena ni gloria, pero los románticos porteños le encontrarán la vuelta acudiendo en masa a un rubro que siempre fue un fiel aliado: el de los pasacalles.
Según indagó Crítica de la Argentina, el día que San Valentín anda tirando flechas a discreción, los pedidos de pasacalles con mensajes románticos aumentan hasta un 300 por ciento.
París es un bastión socialista y liberal en territorio de Sarkozy. Su alcalde desde 2001, Bertrand Delanoë, es abiertamente homosexual y uno de los cuadros más importantes de la izquierda gala. Por eso no sorprendió el as que tenía bajo la manga para el 14 y que difícilmente hubiera salido de un gobierno conservador. Lo de los carteles luminosos está dirigido a los espíritus retraídos.
“La ves todas las mañanas en el subte. Dejás tu bicicleta al costado de la suya. Van a la misma panadería y, sin embargo, nunca te atreviste a revelarle tus sentimientos”, plantean desde la municipalidad. El servicio consiste en poder dejar un mensaje por internet de hasta 160 caracteres que aparecerá en un cartel luminoso informativo. Esos carteles están por toda la ciudad y las dulces palabras aparecerán en aquel del barrio que haya elegido el usuario. Después se elegirá a “la más bella declaración de amor” de cada barrio, que tendrá el privilegio de ser reproducida en el letrero durante todo el 14.
En Buenos Aires, los que estarán por todas partes son los pasacalles. Sus fabricantes prevén un boom de pedidos, hasta 300% más que un día cualquiera. Los mensajes para San Valentín, explicaron a este diario las empresas del sector, son muy variados, van desde los obvios, del estilo “te amo con locura” o “feliz día, mi amor”, hasta aquellos de arrepentidos, que aprovechan un día de defensas bajas para buscar volver con el ex con un “hoy más que nunca, perdoname”. Cristina Gigioni hace 20 años que está en el negocio con su esposo. Todas las madrugadas de los 14 de febrero se la pasan recorriendo la ciudad para colgar sigilosamente pasacalles en las direcciones que sus clientes les hayan indicado.
“Recuerdo el mensaje de un pasacalle de San Valentín que colocamos, que me marcó mucho, decía ‘vivo los días que te veo, y los que no, vivir deseo’” cuenta Gigioni.
En lo que a pasacalles románticos respecta, no hay un sexo que los pida más que otro: las empresas concuerdan en que las mujeres se entusiasman tanto con sorprender a sus parejas como los varones.
Un pasacalle con colocación cuesta en promedio 150 pesos. Y si bien los jóvenes son el grupo principal de demanda, no hay edad que les rehuya. Gigioni explica que, en general, prenden más en los lugares con alma de barrio que en aquellos “chetos, como Recoleta o Palermo”, donde son más raros.
Esta decana de los pasacalles recuerda una anécdota de San Valentín. “Un señor casado nos pidió dos pasacalles con el mismo texto. Uno era para su mujer y otro para su amante. Pero resulta que al esposo de su amante no le gustó nada y, cuando vio el pasacalle, nos llamó enojado diciéndonos que se lo mandáramos a la casa de la abuelita del cliente”.
criticadigital.com

1 comentario:

Recoleta dijo...

Todos dicen te amo en esas dos ciudades. Yo me pregunto si también aman.