MARÍA VALERIO
MADRID.- En un intento por controlar el buen uso de ciertos medicamentos contra el asma, la agencia estadounidense del medicamento, FDA, ha decidido endurecer los mensajes de advertencia en cuatro de estos fármacos: Serevent, Foradil, Advair y Symbicort. La información sobre los riesgos de un mal uso de esta familia de antiasmáticos ya estaba incluida en los prospectos en Europa.
Dichos productos broncodilatadores se denominan beta agonistas de efecto prolongado (LABA, según sus siglas en inglés), cuya acción consiste en relajar los músculos de las vías respiratorias para facilitar la respiración. Aunque en EEUU los cuatro fármacos están autorizados tanto para el asma como para la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), la nueva advertencia sólo afecta a la primera indicación.
Como explica a ELMUNDO.es Carlos Barcina, asesor del departamento médico de Astra Zeneca (fabricante de Symbicort), la decisión estadounidense no afecta a Europa, donde las fichas técnicas y las guías de las sociedades científicas ya recogen la necesidad de combinar estos fármacos con esteroides inhalados.
"En Europa ya se recoge que estos fármacos no sirven para el control del asma, sino para aliviar los síntomas en momentos puntuales", aclara el representante de Astra Zeneca. Sin embargo, no descarta que muchos pacientes estadounidenses los empleen mal por una cuestión económica. "Ellos notan que les alivian en el momento, no que tienen una enfermedad crónica que deben controlar", apunta.
José Ramón Villa Asensi, jefe de Sección de Neumología Pediátricia del Hospital Niño Jesús de Madrid, reconoce que desde "hace tiempo se sabe, gracias a los datos de varios estudios que los broncodilatadores de acción prolongada pueden elevar el riesgo de empeoramiento de los síntomas del asma. Por ese motivo se prescriben en combinación con corticosteroides", informa Patricia Matey.
Este especialista reconoce que este tipo de terapia combinada se recomienda en mayor medida a los adultos, "aunque su uso también es frecuente en los niños". Pese a las nuevas advertencias que deben llevar estos productos en su etiquetado, hace un llamamiento a la calma "dado que la terapia del asma infantil se está haciendo bien en nuestro país".
Una larga historia
Ya en el año 2005, la FDA alertó que de dichos broncodilatadores de acción prolongada se asociaban con un riesgo de empeoramiento de las sibilancias (broncoespasmo) y solicitaba a los fabricantes que actualizaran sus advertencias en la etiqueta del producto. Un requerimiento que endureció de nuevo en los años 2006 y 2007, según una nota del Centro Nacional de Farmacovigilancia del Ministerio de Sanidad.
Ahora de nuevo la FDA insiste en que estos beta agonistas no deben emplearse nunca ni en adultos ni en niños sin el uso simultáneo de otros antiasmáticos como son los corticosteroides inhalados de larga duración; y que debe reservarse su uso para aquellos pacientes que no pueden controlar su asma con otros medicamentos.
En un comunicado hecho público esta semana, la agencia sanitaria de EEUU recomienda que estos cuatro fármacos se empleen durante el menos tiempo posible, y que se abandone su uso una vez controlado el asma.
La decisión de endurecer la información sobre estos medicamentos se produce después de que varios ensayos clínicos alertasen de que el uso de dichos productos podría empeorar los ataques de asma, requerir hospitalización en algunos casos e, incluso, provocar la muerte del paciente. "Aunque estos medicamentos juegan un papel importante en algunos casos, su uso debe ser limitado", señala la agencia en una nota pública. Además, los fabricantes de dichos productos deberán llevar a cabo más ensayos clínicos sobre la seguridad de su uso combinado con esteroides.
elmundo.es
MADRID.- En un intento por controlar el buen uso de ciertos medicamentos contra el asma, la agencia estadounidense del medicamento, FDA, ha decidido endurecer los mensajes de advertencia en cuatro de estos fármacos: Serevent, Foradil, Advair y Symbicort. La información sobre los riesgos de un mal uso de esta familia de antiasmáticos ya estaba incluida en los prospectos en Europa.
Dichos productos broncodilatadores se denominan beta agonistas de efecto prolongado (LABA, según sus siglas en inglés), cuya acción consiste en relajar los músculos de las vías respiratorias para facilitar la respiración. Aunque en EEUU los cuatro fármacos están autorizados tanto para el asma como para la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), la nueva advertencia sólo afecta a la primera indicación.
Como explica a ELMUNDO.es Carlos Barcina, asesor del departamento médico de Astra Zeneca (fabricante de Symbicort), la decisión estadounidense no afecta a Europa, donde las fichas técnicas y las guías de las sociedades científicas ya recogen la necesidad de combinar estos fármacos con esteroides inhalados.
"En Europa ya se recoge que estos fármacos no sirven para el control del asma, sino para aliviar los síntomas en momentos puntuales", aclara el representante de Astra Zeneca. Sin embargo, no descarta que muchos pacientes estadounidenses los empleen mal por una cuestión económica. "Ellos notan que les alivian en el momento, no que tienen una enfermedad crónica que deben controlar", apunta.
José Ramón Villa Asensi, jefe de Sección de Neumología Pediátricia del Hospital Niño Jesús de Madrid, reconoce que desde "hace tiempo se sabe, gracias a los datos de varios estudios que los broncodilatadores de acción prolongada pueden elevar el riesgo de empeoramiento de los síntomas del asma. Por ese motivo se prescriben en combinación con corticosteroides", informa Patricia Matey.
Este especialista reconoce que este tipo de terapia combinada se recomienda en mayor medida a los adultos, "aunque su uso también es frecuente en los niños". Pese a las nuevas advertencias que deben llevar estos productos en su etiquetado, hace un llamamiento a la calma "dado que la terapia del asma infantil se está haciendo bien en nuestro país".
Una larga historia
Ya en el año 2005, la FDA alertó que de dichos broncodilatadores de acción prolongada se asociaban con un riesgo de empeoramiento de las sibilancias (broncoespasmo) y solicitaba a los fabricantes que actualizaran sus advertencias en la etiqueta del producto. Un requerimiento que endureció de nuevo en los años 2006 y 2007, según una nota del Centro Nacional de Farmacovigilancia del Ministerio de Sanidad.
Ahora de nuevo la FDA insiste en que estos beta agonistas no deben emplearse nunca ni en adultos ni en niños sin el uso simultáneo de otros antiasmáticos como son los corticosteroides inhalados de larga duración; y que debe reservarse su uso para aquellos pacientes que no pueden controlar su asma con otros medicamentos.
En un comunicado hecho público esta semana, la agencia sanitaria de EEUU recomienda que estos cuatro fármacos se empleen durante el menos tiempo posible, y que se abandone su uso una vez controlado el asma.
La decisión de endurecer la información sobre estos medicamentos se produce después de que varios ensayos clínicos alertasen de que el uso de dichos productos podría empeorar los ataques de asma, requerir hospitalización en algunos casos e, incluso, provocar la muerte del paciente. "Aunque estos medicamentos juegan un papel importante en algunos casos, su uso debe ser limitado", señala la agencia en una nota pública. Además, los fabricantes de dichos productos deberán llevar a cabo más ensayos clínicos sobre la seguridad de su uso combinado con esteroides.
elmundo.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario