miércoles, 5 de agosto de 2009

Internet, laboratorio de la literatura más vanguardista



Un mundo virtual con escenas de pesadilla y música tétrica es el hábitat de la poesía que Nathalie Lawhead invita a descubrir en su web Blue Suburbia. Bocadillos de cómic se desplazan sobre planos reales de ciudades en todo el mundo mientras cuentan el 'thriller' protagonizado por un personaje sin rostro de Charles Cumming, 'The 21 steps'. Una cadena de palabras que el internauta puede borrar o reescribir avanzan y desaparecen en la pantalla sobre una cadena de escenarios grises o en ruinas fotografiados por Jody Zellen.
Los creadores de páginas como éstas ni siquiera sueñan con audiencias como las de Ruiz Zafón, pero sirven de banco de pruebas de una literatura tan experimental que su nombre aún no está definido ('e-literature', literatura digital o literatura expandida son algunos de los candidatos).
Es una literatura que desborda las posibilidades del papel, juega a crear espacios de un arte híbrido que mezcla con literatura escenarios virtuales, sonido o vídeo, implica al internauta en la construcción de historias o crea personajes ficticios que utilizan los blogs para ir contando novelas en tiempo real.
"Permite una aproximación mucho más directa a la obra, todo está a un clic de ratón"
"En esta creación literaria para Internet se combina gente de la escena 'underground', por un lado escritores que no tienen editor o que se llevan mejor con 'performers' y artistas visuales y, por otro, músicos o videoartistas interesados en estos proyectos", cuenta Eloy Fernández Porta, director del congreso sobre literatura y nuevas tecnologías NEO3. "En definitiva, lo más raro de cada casa", bromea.
Internet "permite una aproximación mucho más directa a la obra, todo está a un clic de ratón", cuenta el profesor y escritor. La red se convierte además en un espacio de recepción de estas obras, intercambio de ideas y discusión. Y la literatura de vanguardia fue la primera en aprovecharse del medio: "Internet empezó siendo un estudio de literatura experimental", aunque luego se incorporaron formas literarias más generalizadas (y fórmulas de márketing literario) que, a la postre, han acabado teniendo más audiencia en la red, cree Fernández.
Para el autor, la poesía, el ensayo y el microrrelato son los géneros que más provecho le pueden sacar a la Red, aunque no faltan los casos de blog novelas con éxito. Como la obra de Hernán Casciari '¡Más respeto, que soy tu madre!', que acabó llevando al papel y a los teatros los problemas de un ama de casa argentina que debe lidiar con su esposo, su suegro drogadicto y tres hijos adolescentes en plena crisis. O la ya impresa 'París Tres', de Aloma Rodríguez, que también nación en la blogosfera.
La poesía, el ensayo y el microrrelato son los géneros que más provecho le pueden sacar a la Red
El problema es que los proyectos más experimentales "requieren en general, mucho tiempo y trabajo en equipo con gente que tenga conocimientos informáticos", cuenta
Miriam Reyes, escritora que se sumó a las trincheras de la poesía digital combinando música electrónica, imágenes abstractas y poesía recitada. Había empezado con animaciones en Flash, un proyecto que ahora le apetece retomar.
Entre los trabajos más complejos, obras construidas con fórmulas de generación aleatoria de palabras para construir poesía y que juegan con las fórmulas del "cadáver exquisito", proyectos en los que el lector puede "crear textos nuevos a partir de las palabras del escritor" o que explotan "las capacidades poéticas del lenguaje de programación". Un ejemplo muy elaborado:
'telepoesis.net', un experimento con interfaz de videojuego en el que el participante va construyendo sus propios poemas a lo largo del camino.
Todos estos proyectos encuentran sus ancestros en la literatura hipertextual, un engendro gestado a principios de los 80, en el despacho de Robert Coover en la Universidad de Brown, cuenta Fernández Porta. Entonces, Internet era sólo un proyecto, pero Coover jugaba ya a crear un género que llevara hasta sus últimas consecuencias el camino emprendido en papel por Julio Cortázar con su 'Rayuela' o por los experimentos del colectivo Oulipo. La primera novela pensada para Internet, 'Afternoon', de Michael Joyce, había nacido en 1980. En ella, un hombre presencia un accidente de tráfico y, dependiendo de las elecciones del lector, puede (o no) implicar en el asunto a su mujer y sus hijos.
La primera novela pensada para Internet fue 'Afternoon', the Michael Joyce'
Ahora la red también sirve "para reflexionar sobre la cultura digital" e incluso para filosofar sobre el sentido de la obra en relación con su entorno: "En ocasiones, un texto sólo tiene sentido porque actúa de nodo, une varias webs, una obra de arte, un vídeo de Youtube...", cuenta Fernández. Aunque, añade, también hay hueco para difundir lo más nuevo de la literatura en papel en antologías que, como 'Afinidades electivas', difunden la poesía de autores de menos de 30 años.
Miriam Reyes cree que el futuro de la literatura digital sera fértil. Dice que estamos en el camino de la normalización, que cada vez hay más festivales (e-poetry, que se celebró en Barcelona en su última edición, ya va por su quinto año y NEO3, por la segunda) y que "cuando crezcan los niños que han nacido ya con las nuevas tecnologías, habrá un salto enorme".
elmundo.es

No hay comentarios: