jueves, 12 de febrero de 2009

Día del Soltero: estar solo es una fiesta


Si la invasión de ositos de peluche, mails en los que te ofrecen todo tipo de objetos con forma de corazón y hasta promociones de spa que te invitan a pasar la tarde más romántica de tu vida empezaron a darte náuseas porque este año San Valentín no te tiene entre sus feligreses, calma: en Buenos Aires se festeja el día mundial del soltero 24 horas antes de que las parejas den su supuesto grito de victoria. Porque, a veces, ser “suelto” no está nada mal.
“¡Impuesto por solteros y solteras de todo el mundo que no se dejan doblegar por preguntas insidiosas de tías, hermanas y compañeros de trabajo que no soportan la envidia de seguir viéndote soltero, vivito y coleando!”, exclama Alejandra Campero a modo de eslogan.
Promotora del sistema de citas rápidas 10en8.com, desde hace dos años reivindica la soltería el 13 de febrero con una megafiesta para que lo singles amanezcan bailando y, quizás, si todo marcha bien, hasta en compañía.
“Tengo un montón de amigas solteras que cada vez que se venía el 14 de febrero buscaban actividades que no tuvieran nada que ver con ese día. Y cuando empecé con 10en8.com también vi que muchas personas llevaban como un karma el Día de los Enamorados. Así que en 2007 se me ocurrió festejar el día del soltero un día antes, para que no sea una fiesta anti-San Valentín, si no una verdadera celebración de solteros”.
La versión local también tiene su contrapartida en el resto del mundo: en varias ciudades de Australia lo bautizaron el “The Valentine’s Cocktail Party”, en Canadá lo llaman “Just Say Love” y en California, “Red Party”. En Buenos Aires todavía no tiene nombre de fantasía. Pero la propuesta es concreta: un bar de microcentro de tres pisos (multiespacio Cooper Downtown, San Martín 628, Buenos Aires) en el que a partir de las 22 y hasta la medianoche los solteros podrán concretar varias citas rápidas y, después, a lanzarse a la pista. “Va a ser una celebración pagana en nombre de la libertad, el amor y la posibilidad de elegir”, define Alejandra.
Mercado hay.
La figura del soltero codiciado a esta altura ya es un clásico, al punto de que tiene su propio reality –The Bachelor, un programa de la cadena estadounidense ABC–, en el que un joven exitoso vive rodeado de 25 mujeres dispuestas a derribar su soltería. Entre las mujeres, en cambio, la palabra solterona supo aparecer, hasta hace poco, como una nube negra que oscurecía la vida de las mujeres de más de 30. “Pero eso de a poco va cambiando, y se nota en las citas que hacemos: ser soltera no es una carga, un peso, sino un estado que a veces se quiere cambiar y otras no”, sostiene Alejandra, con la experiencia que le otorga haber sido testigo de cientos de encuentros de solos y solas.
Las estadísticas reflejan que cada vez son más los y las que no quieren cambiar ese estado: según datos del INDEC, hasta ahora no cuestionados por ninguna consultora, 1.700.000 personas viven solas en la Argentina, el equivalente al 17% de los hogares del país, y se proyecta que para 2010 sean el 22% y para 2025, el 25%. Es decir, habrá muchos y muchas con quienes festejar. “Reconozco que mi parte casamentera también está a toda máquina –dice Alejandra–. Porque va a haber un montón de solteras y solteros sexies y estoy segura de que de ahí pueden salir muchas combinaciones: grupos de amigos, citas de una sola noche, otras más duraderas y, quizá como otros años, hasta algún casamiento”. Como para salvar la contradicción, aclara: “Lo importante es celebrar la soltería, ¡después que cada uno termine como quiera!”.
Miles de postulantes para viajar a la isla del amor
Están quienes dicen que la isla tiene forma de corazón, aunque bien podría ser un culo al revés. Pero como San Valentín se avecina, la morfología romántica le va mejor a este islote sobre el Adriático, en Croacia. Su dueño, Vlado Juresko, que no sabía que ese pedazo de tierra deshabitado tenía una forma privilegiada hasta que lo chequeó en el Google Earth, recibió miles de pedidos de parejas para pasar el 14 de febrero ahí. “Tiene la forma de corazón más perfecta. Nadie vive allí, si los amantes quieren pasar tiempo a solas, es la mejor opción”.

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