jueves, 24 de junio de 2010

Los peligros del intercambio de pareja

ISABEL F. LANTIGUA
MADRID.- Los clubs y fiestas de intercambio de pareja están de moda. Cambiar por una noche la compañía sexual sin que el cónyuge habitual se moleste parece que da morbo, como demuestra el aumento de locales que ofrecen estos servicios, tanto en España como en otros países. Sin embargo, los swingers -como se denomina a las personas heterosexuales que acuden a estos lugares- además de divertirse, experimentar y conocer gente nueva, están expuestos a un riesgo: contraer alguna enfermedad de transmisión sexual(ETS).
Un equipo de investigadores holandeses ha llevado a cabo un trabajo en el que compara la prevalencia de infecciones como la clamidia, la gonorrea o el VIH en 'swingers' y en otros grupos considerados de riesgo como el de las prostitutas o el de los hombres que tienen relaciones con otros hombres (HSH), así como en la población general. Y los resultados, que aparecen en la revista 'Sexually Transmitted Infections', son bastante esclarecedores. Tanto que, según los autores del trabajo, este colectivo debería empezar a formar parte cuanto antes de las campañas de prevención de este tipo de enfermedades, pues sufren ETS en la misma medida que los varones homosexuales o las trabajadoras del sexo.
La investigación se realizó entre 2007 y 2008 en tres clínicas de enfermedades de transmisión sexual en South Limburg (Países Bajos). El Servicio Público de Salud de este lugar ofrece pruebas gratuitas de detección de ETS y, desde 2007, registra sistemáticamente a aquellos pacientes que reconocen ser 'swingers', al igual que se hace con otros colectivos de riesgo. De las casi 9.000 consultas que se atendieron durante el año de estudio, el 12% correspondió a aficionados al intercambio de parejas con una edad media de 43 años. Así vieron que la infección por clamidia y gonorrea, medidas de forma combinada, afectó al 14% de los hombres que se acuestan con otros y después de ellos, el segundo grupo más vulnerable, fue el de los swingers.
Asimismo, el equipo destaca que la edad es un factor que juega en contra del intercambio de pareja. Mientras que la prevalencia de ETS disminuye en los heteresoxuales a medida que cumplen años y permanece estable en los colectivos de HSH y prostitutas; en el caso de los swingers, se dispara. Más de la mitad de los diagnósticos (el 55%) realizados en pacientes mayores de 45 años correspondió a personas que practicaban este juego sexual del intercambio.
Sin embargo, "mientras los otros grupos, como los jóvenes y los gays son objeto de campañas preventivas y son identificados en los servicios de salud, no ocurre lo mismo con los swingers, que son un colectivo olvidado por las autoridades, a pesar de que pueden estar propagando infecciones en el resto de la población", señala Nicole Dukers-Muijrers, una de las autoras del trabajo, del departamento de enfermedades infecciosas del Servicio de Salud Pública de South Limburg.
"Los beneficios económicos de los programas de prevención y detección de ETS mejorarían si se identificara a todos los grupos de riesgo. Pero ahora mismo, hay algunos que no se tienen en cuenta", añade. Y esto, pese a que todos los datos apuntan a que el intercambio de parejas es un fenómeno en alza. Aunque no hay cifras oficiales disponibles, se estima que el número de personas que incurren en esta práctica es elevado. Una de las páginas webs más populares para los 'swingers' (Swingers Date Club) señala que hay millones de individuos dispuestos a cambiar de pareja en todo el mundo. Pero ningún país los incluye en sus programas nacionales de prevención de enfermedades.

elmundo.es

1 comentario:

escorts en Madrid dijo...

Nunca lo hice y creo que si no me lo propone un cliente no lo haré, aunque como bien se dice, nunca digas nunca