Vacaciones seguras con los chicos

Evangelina Himitian
Llega la hora de armar las valijas y salir de vacaciones. Sin embargo, si no se toman todas las precauciones necesarias, el anhelado descanso podría acabar de la peor manera. Las estadísticas indican que la principal causa de muerte en niños son los accidentes, una denominación que muchos médicos intentan erradicar para reemplazarla por el concepto de cadena de errores y malas decisiones de los adultos a cargo.

Antes de salir hay que hacer un chequeo general del coche, de los fluidos del motor y del radiador, verificar los frenos, la batería, las correas, las bujías, entre otros. También, revisar el estado de los neumáticos y comprobar si es necesario cambiarlos.

"No hay que planificar el viaje teniendo en cuenta sólo la distancia y el tiempo. Cuando se va con chicos, es necesario detenerse cada dos horas y hacer un recreo de por lo menos 20 minutos", aconsejó el doctor Mario Elmo, secretario del Comité de Pediatría Ambulatoria de la Sociedad Argentina de Pediatría.

No hay que olvidar que el lugar de los niños es el asiento trasero y con el cinturón puesto. Los menores de cuatro años deben viajar en sus sillitas y los bebes que pesen menos de 9 kilos, con el asiento invertido. "Nunca llevarlos a upa, ni siquiera para amamantarlos. Es muy peligroso. Se debe parar, si es necesario. A lo mejor un viaje a la costa puede insumir seis horas o más, pero lo importante es viajar seguros", aporta el pediatra Diego Montes de Oca. "Llevar objetos sueltos en la luneta es muy peligroso, ya que se convierten en proyectiles. Es mejor preguntarse si todo lo que se cargó es necesario", dice Elmo.

Comer liviano

Leandro Seoane, coordinador del Servicio de Emergencias del Hospital Austral, también recomienda que las comidas durante el viaje sean frugales: "Es bueno optar por los hidratos de carbono simples, como sándwiches, porque son de fácil y rápida digestión. Así se disminuye la posibilidad de náuseas y vómitos, a diferencia de lo que ocurre con los snacks". Las gastroenteritis y la contaminación con parásitos son frecuentes en niños durante las vacaciones. Los pediatras recomiendan consumir agua embotellada y preferir las comidas poco elaboradas hechas en casa a las compradas en rotiserías y restaurantes.

Tampoco hay que descuidar la protección solar. "Los menores de un año no deberían ir a la playa, ya que no pueden regular la temperatura. Además, antes de los seis meses no se les puede colocar protector", dice Montes de Oca. "Los menores de dos años no deberían estar en la playa entre las 10 y las 16, y los niños mayores, al igual que los adultos, evitar la exposición entre las 11 y las 15. Siempre deben tener un protector con factor superior a 30, colocado media hora antes y vuelto a aplicar cada dos horas. Tomar mucho líquido y no jugar al sol en malla, sino con remera, pantalón y gorro tipo Piluso . Sólo deben quedarse en traje de baño para entrar en el agua", dice Elmo.

Hay que tomar recaudos cuando juegan en la orilla o se meten al mar: "Debe ser un adulto y no dos. Siempre designar cuál de los padres estará al cuidado. Esa persona debería estar siempre atenta. La mayor cantidad de ahogamientos se produce en chicos de entre uno y tres años. Alcanza con que haya 5 cm de agua para que un chico pueda ahogarse", advierte Montes de Oca. También se recomienda evitar que manejen cuatriciclos o anden en bicicleta sin usar casco.

NO OLVIDAR

• Botiquín : para atender lastimaduras: guantes, gasas, jabón antiséptico, solución iodopovidona, vendas, apósitos, cinta adhesiva. Para quemaduras: pomada antibacteriana y cicatrizante, gasas, loción antibiótica y una antialérgica. Medicamentos, sólo los ya indicados, como antibióticos, analgésicos, antiinflamatorios, antitérmicos, descongestivos, antidiarreicos. Siempre se debe consultar al médico y los padres no deben medicar a los niños.

• La credencial: hay que recordar llevar el carnet de la obra social o medicina prepaga y los documentos. También, tener a mano los teléfonos de atención médica y de emergencia en el destino.

• Protectores y bloqueadores : alcanza con olvidarse una vez de colocarle protector solar o bloqueador para que un chico pase varios días padeciendo los dolores de las quemaduras en la piel.

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