DUNEDIN, Nueva Zelanda.- Los Pumas disfrutaron de su segundo día libre desde que se instalaron en Nueva Zelanda. La ajustada derrota ante Inglaterra ya quedó atrás, así como también el crudo frío de los últimos dos días aquí. El plantel, previo al viaje a Invercargill, donde el sábado el seleccionado se medirá con Rumania, compartió un asado en el mediodía del miércoles en Dunedin. Risas, alegría y un momento íntimo, además de un alto en la dieta diaria que sigue cada uno de los jugadores a rajatabla. Es que el Mundial es un torneo largo y la alimentación durante el certamen no es un tema menor, más en un deporte de tanto desgaste. Desayuno, almuerzo, merienda y cena. Nadie puede saltearse ninguna de las cuatro comidas y cada uno debe seguir un régimen. Ahora bien, ¿cuánto come realmente un Puma?
"En la preparación física, en Pensacola, Estados Unidos, se evaluó a los jugadores nutricionalmente y se les hizo a cada uno una dieta de calorías en forma particular, luego de medir y pesar a todos. Según la medición de pliegues, se definió si necesitaban mantener, subir o bajar el peso. Cada uno debe ir respetando su dieta. Saben cuántas calorías hay que consumir en las cuatro comidas diarias en base a tres pilares: proteínas, hidratos de carbono y grasas", cuenta Guillermo Botto, el médico del plantel, el hombre que se encarga cada vez que la delegación llega a un hotel de charlar con el cocinera para darle indicaciones de lo que necesita y con el objetivo de "argentinizar" la comida en cuanto a los condimentos a utilizar. "Previo al Mundial, ya me contacté con todos De Buenos Aires, no trajimos nada", cuenta el doctor.
La dieta de los Pumas es de entre 3000 y 3500 calorías diarias, mientras que una persona que trabaja, estudia o realiza una actividad normal consume 2000 por día. El plantel respeta las cuatro comidas. De 7.30 a 9.30 es el desayuno, en el cual hay cereales, yogurt, frutas y revueltos con huevo y jamón. Después, a entrenarse y, entre 12 y 13.30, se sirve el almuerzo, que consta de un plato de pastas, carne, pollo o pescado con ensaladas y frutas de postre, además de almendras, nueces o alguna sopa. A las 17.30, es la merienda, con tostadas con jamón y queso. Por último, la cena es similar al almuerzo. Además, se toman suplementos en base a proteínas y aminoácidos. Antes y después de los entrenamientos, se consumen bebidas isotónicas y unos licuados comprados en Estados Unidos de chocolate, vainilla o frutilla, que se preparan en licuadora.
Botto explica que los jugadores deben evitar los dulces y las gaseosas. De todos modos, no todo es tan estricto. "La dieta es como nos dijeron en Pensacola 80 y 20 por ciento. Es decir, se cumple rigurosamente en la semana el 80 por ciento. Luego, el día después del partido o la noche que salimos a comer afuera hay permitidos", dice Botto. Entonces, entran en juego los alfajores o después de los partidos hay milanesa, con papas fritas y huevo, como sucedió el sábado último luego del match ante Inglaterra. También, esa noche después de jugar quien quiere puede consumir alguna bebida alcoholica. Están los asados, siempre en base a carnes con poca grasa y sin achuras.
Los días de partido son un mundo aparte en cuanto a la alimentación. Para el match del sábado ante Rumania, que se jugará a las 15.30 de Nueva Zelanda, las 00.30 en la Argentina, ya está todo decidido, de acuerdo a los planes de Botto. "Lo ideal es que se levanten temprano y desayunen. Luego, que descansen y, a las 11, se servirá el almuerzo, que será un plato de pasta, pollo y frutas de postre. Siempre que jugamos les damos una porción de pastas cuatro horas antes. El otro día contra Inglaterra las servimos a las 4 de la tarde. Es hidrato de carbono, lo que más rápido se digiere y se transforma en energía", señala el doctor, que aclara que una vez concluido el encuentro lo importante es una buena hidratación y después sí comer algo. Incluso, en el vestuario siempre hay sándwiches de jamón, queso y tomate, frutas y barras cereales. Así comen los Pumas para alimentar sus sueños mundiales.
lanacion.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario