En lo que puede ser visto como una anomalía de los lazos sanguíneos, una mujer se convertirá en los próximos meses en abuela y madre al mismo tiempo. Es una mexicana que decidió prestar su vientre para que su hijo homosexual de 31 años pueda convertirse en padre.
Para cumplir el sueño de Jorge, el desafío de esta familia comenzó el 9 de noviembre de 2009. Cinco meses más tarde, la madre sustituta estaba felizmente embarazada. Además de ayudar a su hijo, la intención de la madre era devolver el favor a Jorge, quien unos años antes había donado un riñón para salvar la vida de su padre.
La historia de la fertilización se puso en marcha con un programa de televisión sobre madres postizas en donde los especialistas coincidían en que la mejor madre sustituta era la abuela. Esta noticia sirvió de disparador para que la madre de Jorge le ofreciera el vientre a su hijo.
En el mundo, la gran mayoría de casos conocidos entre familiares son de parejas heterosexuales.
Al principio Jorge se resistió a la propuesta de su mamá. Pero al final sintió que no existía alternativa mejor. “Mi mamá me decía: ‘piensa en el niño, una madre sustituta lucha todo el tiempo por no quererlo porque lo va a dar, y yo no, porque va a ser mi nieto, por favor’”, le pidió.
La mujer, de 50 años (no fue identificada), cumplirá el doble rol de madre y abuela. Según comentó al diario mexicano Reforma, dar vida a un bebé es un acto de amor, razón que la motivó a hacer de su vientre “un lugarcito para que creciera” su nieto. “Nunca me he arrepentido. Al contrario, es un gusto y un privilegio hacerlo. También es cierto que sufrí cambios hormonales. Luego empecé a engordar”, reveló.
La noticia fue compartida con amigos y familiares cuando se estuvo seguro de que la madre sustituta estaba embarazada. Y aunque los riesgos por la edad son muchos, Jorge reconoce que al mirar el ultrasonido de su hijo sabe que todo el esfuerzo valió la pena.
El bebé nacerá por cesárea el 1° de noviembre y será registrado con los apellidos de los padres de Jorge. Ya que, según las leyes mexicanas en vigor, la madre del niño sería su madre sustituta.
Los óvulos fueron donados por la mejor amiga de Jorge . Tras la extracción, se realizó una fecundación in vitro, con esperma del interesado. Una vez que el óvulo fue fecundado, se obtuvo un cigoto y éste se cultivó en laboratorio. Finalmente, el embrión se introdujo en el útero de la abuela y madre sustituta.
clarin.com
Para cumplir el sueño de Jorge, el desafío de esta familia comenzó el 9 de noviembre de 2009. Cinco meses más tarde, la madre sustituta estaba felizmente embarazada. Además de ayudar a su hijo, la intención de la madre era devolver el favor a Jorge, quien unos años antes había donado un riñón para salvar la vida de su padre.
La historia de la fertilización se puso en marcha con un programa de televisión sobre madres postizas en donde los especialistas coincidían en que la mejor madre sustituta era la abuela. Esta noticia sirvió de disparador para que la madre de Jorge le ofreciera el vientre a su hijo.
En el mundo, la gran mayoría de casos conocidos entre familiares son de parejas heterosexuales.
Al principio Jorge se resistió a la propuesta de su mamá. Pero al final sintió que no existía alternativa mejor. “Mi mamá me decía: ‘piensa en el niño, una madre sustituta lucha todo el tiempo por no quererlo porque lo va a dar, y yo no, porque va a ser mi nieto, por favor’”, le pidió.
La mujer, de 50 años (no fue identificada), cumplirá el doble rol de madre y abuela. Según comentó al diario mexicano Reforma, dar vida a un bebé es un acto de amor, razón que la motivó a hacer de su vientre “un lugarcito para que creciera” su nieto. “Nunca me he arrepentido. Al contrario, es un gusto y un privilegio hacerlo. También es cierto que sufrí cambios hormonales. Luego empecé a engordar”, reveló.
La noticia fue compartida con amigos y familiares cuando se estuvo seguro de que la madre sustituta estaba embarazada. Y aunque los riesgos por la edad son muchos, Jorge reconoce que al mirar el ultrasonido de su hijo sabe que todo el esfuerzo valió la pena.
El bebé nacerá por cesárea el 1° de noviembre y será registrado con los apellidos de los padres de Jorge. Ya que, según las leyes mexicanas en vigor, la madre del niño sería su madre sustituta.
Los óvulos fueron donados por la mejor amiga de Jorge . Tras la extracción, se realizó una fecundación in vitro, con esperma del interesado. Una vez que el óvulo fue fecundado, se obtuvo un cigoto y éste se cultivó en laboratorio. Finalmente, el embrión se introdujo en el útero de la abuela y madre sustituta.
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