¿Cuáles son las excusas? ¿Cuáles los beneficios y cuáles las consecuencias de evitar la rutina de dormir con tu pareja? ¿Cómo afecta a la intimidad? Según los estudios, las principales causas de la necesidad de separarse para dormir son: la diferencia de horarios y agenda, los ronquidos y otros problemas para conciliar el sueño. También la eterna discusión acerca de mirar o no la televisión antes de cerrar los ojos es uno de los factores (aunque el artículo hace mención a la intervención de otras tecnologías como la computadora o el celular y la adicción a las mismas). Y quizás la rutina generada por décadas de matrimonio pueda recibir un golpe de aire fresco con un cambio como este. A pesar de que los resultados no están comprobados, se estima que para 2015 el 60 por ciento de los hogares del mundo tengan dos habitaciones para una única pareja.
¿Qué pensás de esta tendencia? ¿La pondrías en práctica si tenés problemas para dormir con tu pareja?
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